La palabra "vidente" es una de las más mencionadas en la Biblia y tiene un significado muy importante dentro de la tradición cristiana. En este artículo, profundizaremos en su etimología, origen y significado bíblico.
La palabra "vidente" proviene del latín "videns", que significa "ver". En la mayoría de las lenguas romances, como el francés, el italiano y el español, la palabra se ha mantenido con una raíz similar: "voyant", "vedente" y "vidente", respectivamente.
En la Biblia, la palabra "vidente" se utiliza para referirse a aquellos que tienen la capacidad de recibir visiones y mensajes de Dios. En el Antiguo Testamento, los videntes eran considerados profetas y eran consultados por los reyes y líderes para obtener orientación divina.
Uno de los videntes más famosos del Antiguo Testamento fue Samuel, quien sirvió como juez y profeta en Israel durante muchos años. Según el relato bíblico, Samuel fue llamado por Dios desde una edad temprana y recibió varias visiones y mensajes divinos que compartió con el pueblo de Israel.
En el Nuevo Testamento, la palabra "vidente" se utiliza para referirse a aquellos que tienen el don de la profecía y la capacidad de recibir mensajes de Dios. En el libro de Hechos, se menciona a Agabo como un vidente que predijo una gran hambruna en todo el mundo.
El significado bíblico de la palabra "vidente" es aquel que tiene la capacidad de ver y recibir mensajes divinos. Los videntes son considerados como intermediarios entre Dios y los seres humanos, y su papel es proporcionar orientación y dirección divina.
En la Biblia, los videntes son respetados y valorados por su capacidad para comunicarse con Dios y recibir sus mensajes. Se cree que sus visiones y profecías son una forma en que Dios se comunica con la humanidad y les proporciona orientación y dirección en sus vidas.
En resumen, la palabra "vidente" tiene un significado muy importante dentro de la tradición cristiana. Se refiere a aquellos que tienen la capacidad de recibir visiones y mensajes de Dios, y se les considera intermediarios entre Dios y los seres humanos. Su papel es proporcionar orientación y dirección divina a aquellos que buscan la voluntad de Dios en sus vidas.
Última actualización: 13 mayo, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de vidente:
1 Samuel 9:9
(Antiguamente en Israel cualquiera que iba a consultar a Dios, decía así: Venid y vamos al vidente; porque al que hoy se llama profeta, entonces se le llamaba vidente.)
1 Samuel 9:11
Y cuando subían por la cuesta de la ciudad, hallaron unas doncellas que salían por agua, a las cuales dijeron: ¿Está en este lugar el vidente?
1 Samuel 9:18
Acercándose, pues, Saúl a Samuel en medio de la puerta, le dijo: Te ruego que me enseñes dónde está la casa del vidente.
1 Samuel 9:19
Y Samuel respondió a Saúl, diciendo: Yo soy el vidente; sube delante de mí al lugar alto, y come hoy conmigo, y por la mañana te despacharé, y te descubriré todo lo que está en tu corazón.
2 Samuel 15:27
Dijo además el rey al sacerdote Sadoc: ¿No eres tú el vidente? Vuelve en paz a la ciudad, y con vosotros vuestros dos hijos; Ahimaas tu hijo, y Jonatán hijo de Abiatar.
2 Crónicas 12:15
Las cosas de Roboam, primeras y postreras, ¿no están escritas en los libros del profeta Semaías y del vidente Iddo, en el registro de las familias? Y entre Roboam y Jeroboam hubo guerra constante.
2 Crónicas 16:10
Entonces se enojó Asa contra el vidente y lo echó en la cárcel, porque se encolerizó grandemente a causa de esto. Y oprimió Asa en aquel tiempo a algunos del pueblo.
2 Crónicas 33:19
Su oración también, y cómo fue oído, todos sus pecados, y su prevaricación, los sitios donde edificó lugares altos y erigió imágenes de Asera e ídolos, antes que se humillase, he aquí estas cosas están escritas en las palabras de los videntes.
Isaías 29:10
Porque Jehová derramó sobre vosotros espíritu de sueño, y cerró los ojos de vuestros profetas, y puso velo sobre las cabezas de vuestros videntes.
Amós 7:12
Y Amasías dijo a Amós: Vidente, vete, huye a tierra de Judá, y come allá tu pan, y profetiza allá;