La palabra "destrucción" tiene un significado profundo en la Biblia y representa diferentes conceptos y eventos relacionados con la voluntad de Dios. En hebreo, la palabra "destrucción" se traduce como "shachath" y en griego como "apoleia". Ambas palabras tienen una raíz común que implica la idea de "arruinar, arrasar o aniquilar".
En el contexto bíblico, la destrucción puede referirse a la acción directa de Dios para castigar a los pecadores y a aquellos que se alejan de su voluntad. Por ejemplo, en el Diluvio, Dios decidió destruir a la humanidad debido a su maldad y corrupción. En Génesis 6:13, Dios le dice a Noé: "El fin de toda carne ha venido delante de mí, porque la tierra está llena de violencia a causa de ellos; y he aquí, los destruiré con la tierra". Aquí, la destrucción representa el juicio divino y la limpieza de la maldad en la tierra.
Además, la destrucción también se menciona en relación con la caída de ciudades y naciones. Por ejemplo, en el libro de Jeremías, Dios anuncia la destrucción de Jerusalén debido a la rebelión y la idolatría del pueblo. Jeremías 4:6-7 dice: "Alzad bandera en Sion, huid, no os detengáis, porque yo hago venir del norte un mal, y una gran destrucción. Como leones salen de su guarida se ha levantado contra mí; por eso he tomado odio de ellos". Aquí, la destrucción representa el castigo divino por la desobediencia y la idolatría.
En el Nuevo Testamento, la destrucción se menciona en el contexto del juicio final y el destino eterno de los impíos. Jesús advierte sobre la destrucción que vendrá sobre aquellos que no creen en él y rechazan su mensaje. Mateo 7:13-14 dice: "Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan". Aquí, la destrucción representa la separación eterna de Dios y la condenación final.
En resumen, la palabra "destrucción" en la Biblia representa la justicia divina, el juicio y el castigo por el pecado y la maldad. También se refiere a la caída de ciudades y naciones debido a la desobediencia y la idolatría. Además, la destrucción se menciona en el contexto del juicio final y el destino eterno de los impíos. Es importante recordar que, aunque la destrucción es un tema recurrente en la Biblia, también se habla del amor y la misericordia de Dios, y la posibilidad de arrepentimiento y salvación.
Última actualización: 03 febrero, 2024
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de destrucción:
Génesis 19:29
Así, cuando destruyó Dios las ciudades de la llanura, Dios se acordó de Abraham, y envió fuera a Lot de en medio de la destrucción, al asolar las ciudades donde Lot estaba.
2 Reyes 23:13
Asimismo profanó el rey los lugares altos que estaban delante de Jerusalén, a la mano derecha del monte de la destrucción, los cuales Salomón rey de Israel había edificado a Astoret ídolo abominable de los sidonios, a Quemos ídolo abominable de Moab, y a Milcom ídolo abominable de los hijos de Amón.
1 Crónicas 21:12
Escoge para ti: o tres años de hambre, o por tres meses ser derrotado delante de tus enemigos con la espada de tus adversarios, o por tres días la espada de Jehová, esto es, la peste en la tierra, y que el ángel de Jehová haga destrucción en todos los términos de Israel. Mira, pues, qué responderé al que me ha enviado.
Ester 4:7
Y Mardoqueo le declaró todo lo que le había acontecido, y le dio noticia de la plata que Amán había dicho que pesaría para los tesoros del rey a cambio de la destrucción de los judíos.
Ester 9:5
Y asolaron los judíos a todos sus enemigos a filo de espada, y con mortandad y destrucción, e hicieron con sus enemigos como quisieron.
Job 5:21
Del azote de la lengua serás encubierto; No temerás la destrucción cuando viniere.
Salmos 55:1
Plegaria pidiendo la destrucción de enemigos traicionerosAl músico principal; en Neginot. Masquil de David. Escucha, oh Dios, mi oración, Y no te escondas de mi súplica.
Salmos 79:1
Lamento por la destrucción de JerusalénSalmo de Asaf. Oh Dios, vinieron las naciones a tu heredad; Han profanado tu santo templo; Redujeron a Jerusalén a escombros.
Salmos 83:1
Plegaria pidiendo la destrucción de los enemigos de IsraelCántico. Salmo de Asaf. Oh Dios, no guardes silencio; No calles, oh Dios, ni te estés quieto.
Proverbios 10:29
El camino de Jehová es fortaleza al perfecto; Pero es destrucción a los que hacen maldad.