Magistrado Significado Bíblico

En la Biblia, la palabra "magistrado" se refiere a una autoridad o gobernante que tiene poder y autoridad sobre otros. El término "magistrado" proviene del latín "magistratus" y se deriva de la palabra "magister", que significa "maestro" o "jefe". En la Biblia, se utiliza para referirse a diferentes tipos de líderes y gobernantes en el contexto político y religioso.

El origen de la palabra "magistrado" se encuentra en el Antiguo Testamento de la Biblia. En el libro de Éxodo, se menciona a los magistrados como líderes o jueces que eran elegidos por el pueblo y que tenían la responsabilidad de administrar la justicia y tomar decisiones legales. Estos magistrados eran hombres sabios y justos que fueron establecidos por Dios para gobernar a su pueblo.

En el Nuevo Testamento, la palabra "magistrado" se utiliza para referirse a las autoridades civiles y gobernantes de la época, como los reyes, gobernadores y emperadores. Jesús mismo reconoció la autoridad de los magistrados y enseñó a sus seguidores que debían obedecer las leyes y someterse a las autoridades establecidas.

En varias ocasiones, la Biblia también habla sobre la responsabilidad de los magistrados de administrar la justicia y proteger a los débiles y oprimidos. En el libro de Proverbios, se dice que los reyes y los magistrados son responsables de juzgar con justicia y de defender los derechos de los pobres y necesitados. También se menciona que los magistrados deben gobernar con sabiduría y temor de Dios.

En resumen, el significado bíblico de la palabra "magistrado" se refiere a una autoridad o gobernante que tiene poder y autoridad sobre otros. El término se deriva del latín y se utiliza en la Biblia para referirse a diferentes tipos de líderes y gobernantes en el contexto político y religioso. Los magistrados son responsables de administrar la justicia, proteger a los débiles y oprimidos, y gobernar con sabiduría y temor de Dios.

Versículos de Magistrado

Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de magistrado:

Daniel 3:2 Y envió el rey Nabucodonosor a que se reuniesen los sátrapas, los magistrados y capitanes, oidores, tesoreros, consejeros, jueces, y todos los gobernadores de las provincias, para que viniesen a la dedicación de la estatua que el rey Nabucodonosor había levantado.

Daniel 3:3 Fueron, pues, reunidos los sátrapas, magistrados, capitanes, oidores, tesoreros, consejeros, jueces, y todos los gobernadores de las provincias, a la dedicación de la estatua que el rey Nabucodonosor había levantado; y estaban en pie delante de la estatua que había levantado el rey Nabucodonosor.

Daniel 6:7 Todos los gobernadores del reino, magistrados, sátrapas, príncipes y capitanes han acordado por consejo que promulgues un edicto real y lo confirmes, que cualquiera que en el espacio de treinta días demande petición de cualquier dios u hombre fuera de ti, oh rey, sea echado en el foso de los leones.

Lucas 12:11 Cuando os trajeren a las sinagogas, y ante los magistrados y las autoridades, no os preocupéis por cómo o qué habréis de responder, o qué habréis de decir;

Lucas 12:58 Cuando vayas al magistrado con tu adversario, procura en el camino arreglarte con él, no sea que te arrastre al juez, y el juez te entregue al alguacil, y el alguacil te meta en la cárcel.

Hechos 16:22 Y se agolpó el pueblo contra ellos; y los magistrados, rasgándoles las ropas, ordenaron azotarles con varas.

Hechos 16:35 Cuando fue de día, los magistrados enviaron alguaciles a decir: Suelta a aquellos hombres.

Hechos 16:36 Y el carcelero hizo saber estas palabras a Pablo: Los magistrados han mandado a decir que se os suelte; así que ahora salid, y marchaos en paz.

Hechos 16:38 Y los alguaciles hicieron saber estas palabras a los magistrados, los cuales tuvieron miedo al oír que eran romanos.

Romanos 13:3 Porque los magistrados no están para infundir temor al que hace el bien, sino al malo. ¿Quieres, pues, no temer la autoridad? Haz lo bueno, y tendrás alabanza de ella;

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