La palabra "cebada" tiene un significado muy importante en la Biblia. En hebreo, la palabra para cebada es "שְׂעֹרָה" (se'orah). La etimología de esta palabra se relaciona con la idea de "pelar" o "descascarillar", lo que alude a la forma en que se procesa la cebada antes de ser consumida. La cebada es uno de los cereales más antiguos cultivados por el ser humano, y su origen se remonta a miles de años atrás en el Creciente Fértil, en la región que hoy conocemos como Oriente Medio.
En la Biblia, la cebada tiene múltiples significados simbólicos. En primer lugar, la cebada es mencionada como uno de los alimentos básicos de la dieta de los israelitas en el Antiguo Testamento. Era considerada un alimento esencial y se utilizaba para hacer harina, pan y cerveza. Además, la cebada también era utilizada como forraje para el ganado.
Sin embargo, más allá de su valor práctico, la cebada también tiene un significado espiritual en la Biblia. En el contexto bíblico, la cebada es asociada con la fertilidad y la abundancia. En el libro de Levítico, por ejemplo, se menciona que la ofrenda de primicias que los israelitas debían presentar al Señor debía ser de cebada. Esta ofrenda representaba el reconocimiento de que todas las bendiciones provenían de Dios y simbolizaba la gratitud y la dependencia del pueblo de Israel hacia Él.
Además, la cebada también es mencionada en el Nuevo Testamento en el contexto de un milagro realizado por Jesús. En el relato de la multiplicación de los panes y los peces, se menciona que los alimentos que Jesús utilizó para alimentar a la multitud eran "cinco panes de cebada" (Juan 6:9). Este detalle no es insignificante, ya que la elección de la cebada como alimento utilizado en el milagro tiene un significado simbólico. La cebada representa la provisión divina y la capacidad de Dios para multiplicar y proveer en abundancia.
En resumen, la palabra cebada tiene un significado bíblico que va más allá de su valor práctico como alimento básico. En la Biblia, la cebada simboliza la fertilidad, la abundancia y la provisión divina. Además, la elección de la cebada como alimento utilizado en el milagro de la multiplicación de los panes y los peces muestra la capacidad de Dios para multiplicar y proveer en abundancia. La cebada es, por tanto, un símbolo de la bendición y la gratitud hacia Dios en el contexto bíblico.
Última actualización: 12 octubre, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de cebada:
Levítico 27:16
Si alguno dedicare de la tierra de su posesión a Jehová, tu estimación será conforme a su siembra; un homer de siembra de cebada se valorará en cincuenta siclos de plata.
Rut 1:22
Así volvió Noemí, y Rut la moabita su nuera con ella; volvió de los campos de Moab, y llegaron a Belén al comienzo de la siega de la cebada.
Rut 2:23
Estuvo, pues, junto con las criadas de Booz espigando, hasta que se acabó la siega de la cebada y la del trigo; y vivía con su suegra.
Rut 3:2
¿No es Booz nuestro pariente, con cuyas criadas tú has estado? He aquí que él avienta esta noche la parva de las cebadas.
2 Samuel 17:28
trajeron a David y al pueblo que estaba con él, camas, tazas, vasijas de barro, trigo, cebada, harina, grano tostado, habas, lentejas, garbanzos tostados,
2 Samuel 21:9
y los entregó en manos de los gabaonitas, y ellos los ahorcaron en el monte delante de Jehová; y así murieron juntos aquellos siete, los cuales fueron muertos en los primeros días de la siega, al comenzar la siega de la cebada.
2 Reyes 4:42
Vino entonces un hombre de Baal-salisa, el cual trajo al varón de Dios panes de primicias, veinte panes de cebada, y trigo nuevo en su espiga. Y él dijo: Da a la gente para que coma.
2 Reyes 7:16
Entonces el pueblo salió, y saqueó el campamento de los sirios. Y fue vendido un seah de flor de harina por un siclo, y dos seahs de cebada por un siclo, conforme a la palabra de Jehová.
2 Crónicas 2:10
Y he aquí, para los trabajadores tus siervos, cortadores de madera, he dado veinte mil coros de trigo en grano, veinte mil coros de cebada, veinte mil batos de vino, y veinte mil batos de aceite.
2 Crónicas 2:15
Ahora, pues, envíe mi señor a sus siervos el trigo y cebada, y aceite y vino, que ha dicho;