En la Biblia, la palabra "guardia" tiene un significado profundo y simbólico. Se utiliza en varios contextos para representar la protección, la vigilancia y la responsabilidad de cuidar algo o alguien. El término "guardia" proviene del latín "guardare", que significa "observar" o "vigilar". Su origen se remonta a los tiempos antiguos, donde las personas solían designar a ciertos individuos para proteger y cuidar de algo o alguien de valor.
En la Biblia, el concepto de "guardia" se menciona en diferentes contextos y con diferentes significados. A lo largo de las Escrituras, se hace referencia a la guardia de los mandamientos de Dios, la guardia de la fe, la guardia de la palabra de Dios y la guardia de la mente y el corazón.
En el Antiguo Testamento, encontramos numerosos ejemplos de guardias designados para proteger ciertos lugares o personas. Por ejemplo, en el libro de Génesis, se menciona a los querubines colocados en el jardín del Edén para proteger el árbol de la vida (Génesis 3:24). En el libro de Éxodo, se habla de los levitas designados como guardias para proteger el tabernáculo y su contenido sagrado (Números 1:53).
La idea de la guardia también se relaciona con la responsabilidad de cuidar y proteger la fe y los mandamientos de Dios. En el libro de Proverbios, se nos insta a "guardar el corazón con toda diligencia, porque de él emanan las fuentes de la vida" (Proverbios 4:23). Aquí, "guardar" implica proteger y vigilar nuestra mente y corazón para evitar que sean corrompidos por pensamientos y deseos malignos.
En el Nuevo Testamento, Jesús habla de la importancia de guardar sus palabras y mandamientos. En el Evangelio de Juan, Jesús dice: "El que me ama, mi palabra guardará" (Juan 14:23). Aquí, "guardar" implica obedecer y vivir de acuerdo con las enseñanzas de Jesús.
Además, el apóstol Pablo habla de la importancia de guardar la fe en varias de sus cartas. En la primera carta a Timoteo, Pablo escribe: "Guarda el mandamiento sin mancha ni reproche hasta la manifestación de nuestro Señor Jesucristo" (1 Timoteo 6:14). Aquí, "guardar" implica mantener y proteger la fe en medio de las pruebas y tentaciones.
En resumen, el significado bíblico de "guardia" implica protección, vigilancia y responsabilidad. Se refiere a la protección de lugares sagrados, personas y valores espirituales. También se relaciona con la responsabilidad de cuidar y proteger la fe, los mandamientos y las enseñanzas de Dios. Como creyentes, se nos llama a ser vigilantes y diligentes en nuestra relación con Dios y en la protección de nuestra fe.
Última actualización: 30 junio, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de guardia:
Génesis 40:3
y los puso en prisión en la casa del capitán de la guardia, en la cárcel donde José estaba preso.
Génesis 41:12
Estaba allí con nosotros un joven hebreo, siervo del capitán de la guardia; y se lo contamos, y él nos interpretó nuestros sueños, y declaró a cada uno conforme a su sueño.
Jueces 8:11
Subiendo, pues, Gedeón por el camino de los que habitaban en tiendas al oriente de Noba y de Jogbeha, atacó el campamento, porque el ejército no estaba en guardia.
1 Samuel 22:17
Entonces dijo el rey a la gente de su guardia que estaba alrededor de él: Volveos y matad a los sacerdotes de Jehová; porque también la mano de ellos está con David, pues sabiendo ellos que huía, no me lo descubrieron. Pero los siervos del rey no quisieron extender sus manos para matar a los sacerdotes de Jehová.
2 Reyes 10:25
Y después que acabaron ellos de hacer el holocausto, Jehú dijo a los de su guardia y a los capitanes: Entrad, y matadlos; que no escape ninguno. Y los mataron a espada, y los dejaron tendidos los de la guardia y los capitanes. Y fueron hasta el lugar santo del templo de Baal,
2 Reyes 11:6
Otra tercera parte estará a la puerta de Shur, y la otra tercera parte a la puerta del postigo de la guardia; así guardaréis la casa, para que no sea allanada.
2 Reyes 22:4
Ve al sumo sacerdote Hilcías, y dile que recoja el dinero que han traído a la casa de Jehová, que han recogido del pueblo los guardianes de la puerta,
2 Reyes 23:4
Reformas de Josías(2 Cr. 34.3-7) Entonces mandó el rey al sumo sacerdote Hilcías, a los sacerdotes de segundo orden, y a los guardianes de la puerta, que sacasen del templo de Jehová todos los utensilios que habían sido hechos para Baal, para Asera y para todo el ejército de los cielos; y los quemó fuera de Jerusalén en el campo del Cedrón, e hizo llevar las cenizas de ellos a Bet-el.
2 Reyes 25:8
Cautividad de Judá(2 Cr. 36.17-21; Jer. 39.8-10; 52.12-30) En el mes quinto, a los siete días del mes, siendo el año diecinueve de Nabucodonosor rey de Babilonia, vino a Jerusalén Nabuzaradán, capitán de la guardia, siervo del rey de Babilonia.
2 Reyes 25:10
Y todo el ejército de los caldeos que estaba con el capitán de la guardia, derribó los muros alrededor de Jerusalén.