Profano es un término que se usa para describir algo que es profano o no sagrado. La palabra proviene del latín profanus, que significa "exterior a lo sagrado", y se refiere a aquello que está separado de lo religioso o lo divino. En la Biblia, profano se refiere a aquello que carece de significado religioso o espiritual.
En el Antiguo Testamento, la palabra profano se usa para referirse a aquellos que no estaban consagrados a Dios, incluyendo a los no judíos, los extranjeros, los paganos y aquellos que no eran de la familia sacerdotal. El profanar era algo que los judíos eran cuidadosos de evitar. Estaba estrictamente prohibido profanar cualquier cosa que se considerara sagrada, incluyendo el templo y sus objetos sagrados. Por ejemplo, en Levítico 22:32-32, Dios les advierte a los judíos:
"No profanarás mi santo nombre, por lo cual yo me daré a conocer a los hijos de Israel. Yo soy el Señor que os santifico".
En el Nuevo Testamento, la palabra profano se usa para referirse a aquellos que no han sido santificados por Dios. Estos son aquellos que no han aceptado a Jesús como su Salvador y no han aceptado el Espíritu Santo como su Señor. Estas personas son consideradas "profanas" porque no tienen una relación santa con Dios. Por ejemplo, en Efesios 4:17-18, dice:
"Esto, por tanto, digo y requiero en el Señor: que ya no andéis como los otros gentiles, que andan en la vanidad de su mente, teniendo el entendimiento entenebrecido, ajenos de la vida de Dios por la ignorancia que en ellos hay, por la dureza de su corazón;
En la Biblia, profano se usa para referirse a aquello que no está consagrado a Dios. Significa que algo está separado de lo sagrado o lo divino. Los judíos en el Antiguo Testamento eran cuidadosos de evitar cualquier cosa que pudiera ser profanada, mientras que en el Nuevo Testamento, profano se usa para referirse a aquellos que no han sido santificados por Dios. Estas personas carecen de una relación santa con Dios.
La etimología de la palabra profano proviene del latín profanus, que significa "exterior a lo sagrado". Esta palabra se refiere a aquello que está separado de lo religioso o lo divino. La palabra ha sido usada en la Biblia para referirse a aquellos que no están consagrados a Dios, tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento. Esta palabra nos recuerda que debemos tener una relación santa con Dios para evitar ser considerados profanos.
Última actualización: 26 marzo, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de profano:
Levítico 10:10
para poder discernir entre lo santo y lo profano, y entre lo inmundo y lo limpio,
1 Samuel 21:5
Y David respondió al sacerdote, y le dijo: En verdad las mujeres han estado lejos de nosotros ayer y anteayer; cuando yo salí, ya los vasos de los jóvenes eran santos, aunque el viaje es profano; ¿cuánto más no serán santos hoy sus vasos?
2 Reyes 23:8
E hizo venir todos los sacerdotes de las ciudades de Judá, y profanó los lugares altos donde los sacerdotes quemaban incienso, desde Geba hasta Beerseba; y derribó los altares de las puertas que estaban a la entrada de la puerta de Josué, gobernador de la ciudad, que estaban a la mano izquierda, a la puerta de la ciudad.
2 Reyes 23:10
Asimismo profanó a Tofet, que está en el valle del hijo de Hinom, para que ninguno pasase su hijo o su hija por fuego a Moloc.
Ezequiel 21:25
Y tú, profano e impío príncipe de Israel, cuyo día ha llegado ya, el tiempo de la consumación de la maldad,
Ezequiel 22:26
Sus sacerdotes violaron mi ley, y contaminaron mis santuarios; entre lo santo y lo profano no hicieron diferencia, ni distinguieron entre inmundo y limpio; y de mis días de reposo apartaron sus ojos, y yo he sido profanado en medio de ellos.
Ezequiel 24:21
Di a la casa de Israel: Así ha dicho Jehová el Señor: He aquí yo profano mi santuario, la gloria de vuestro poderío, el deseo de vuestros ojos y el deleite de vuestra alma; y vuestros hijos y vuestras hijas que dejasteis caerán a espada.
Ezequiel 42:20
A los cuatro lados lo midió; tenía un muro todo alrededor, de quinientas cañas de longitud y quinientas cañas de ancho, para hacer separación entre el santuario y el lugar profano.
Ezequiel 44:23
Y enseñarán a mi pueblo a hacer diferencia entre lo santo y lo profano, y les enseñarán a discernir entre lo limpio y lo no limpio.
Hebreos 12:16
no sea que haya algún fornicario, o profano, como Esaú, que por una sola comida vendió su primogenitura.