Fidelidad Significado Bíblico
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La fidelidad es un atributo aplicado en la Biblia tanto a Dios como a los seres humanos. Dios es leal y fiel a la hora de guardar sus promesas e inmutable en su naturaleza ética. De hecho, se suele asociar la fidelidad de Dios con sus promesas misericordiosas de
salvación.
Las personas fieles son aquellas en las que se puede confiar y se puede depender para cumplir sus responsabilidades y su palabra. De hecho, la fidelidad es uno de los frutos del
Espíritu, tal y como reza Gálatas 5:22:
“Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe”.
La palabra griega para "fe" también puede traducirse como "fidelidad", como ocurre en Tito 2:10. Para entender lo que les faltaba a los escribas y fariseos, tenemos que examinar la fidelidad junto con la definición tradicional de
fe.
La fidelidad, según la definición de Webster, es
“la cualidad de ser fiel, precisión en los detalles, exactitud”. El diccionario añade una interesante analogía moderna para explicar la fidelidad: “el grado en que un dispositivo electrónico (como un tocadiscos, una radio o una televisión) reproduce con precisión su efecto (como el sonido o la imagen)”. Sabemos que debemos llevar “todo pensamiento al cautiverio de la
obediencia de Cristo” (II Corintios 10:5) y “que haya en vosotros este sentir que hubo también en
Cristo Jesús” (Filipenses 2:5). Juan nos dice que “andemos como Él anduvo” (I Juan 2:6). Pedro aconseja: “Cristo... [nos ha dejado un ejemplo, para que sigáis sus pasos” (I Pedro 2:21).
Espiritualmente, la fidelidad es reproducir fiel y exactamente los pensamientos, actitudes, pasos y caminos de Jesucristo. Los “sonidos” que nuestra vida produce en la tierra llegan al cielo, ya sea como el estruendo rasposo y metálico de la carnalidad, o como reproducciones armónicas, melodiosas y agradables de
Cristo en nosotros, la
esperanza de la
gloria.