El significado bíblico del diluvio es uno de los episodios más conocidos y debatidos en la historia de la humanidad. Según el relato del Antiguo Testamento, el diluvio fue un evento catastrófico en el que Dios decidió destruir a toda la humanidad y a los animales debido a la maldad y corrupción que había en la tierra. El diluvio también es conocido como el Gran Diluvio o el Diluvio Universal.
La palabra diluvio proviene del latín "diluvium", que significa "inundación" o "desbordamiento". Su origen etimológico se remonta al antiguo hebreo, donde se utiliza la palabra "mabbul" para referirse al diluvio. En la Biblia, el término "mabbul" se menciona en el libro del Génesis y se utiliza específicamente para describir el diluvio que ocurrió en tiempos de Noé.
El relato bíblico del diluvio se encuentra en el libro del Génesis, capítulos 6 al 9. Según este relato, Dios le reveló a Noé su plan de destruir a la humanidad debido a su maldad. Dios ordenó a Noé que construyera un arca y que entrara en ella junto con su familia y una pareja de cada especie animal para preservar la vida.
El diluvio duró cuarenta días y cuarenta noches, y las aguas cubrieron toda la tierra, incluyendo las montañas más altas. Solo Noé y los seres vivos que estaban en el arca sobrevivieron al diluvio. Después de que las aguas se retiraron, Noé y su familia salieron del arca y Dios hizo un pacto con Noé, prometiendo que nunca más destruiría a la humanidad mediante un diluvio.
El diluvio bíblico ha sido objeto de interpretaciones y debates a lo largo de los siglos. Algunos lo consideran un evento histórico y literal, mientras que otros lo ven como una alegoría o un mito que transmite enseñanzas espirituales y morales. Independientemente de cómo se interprete, el diluvio ha dejado una huella profunda en la cultura y la religión, y su significado trasciende las fronteras religiosas y culturales.
En resumen, el significado bíblico del diluvio está relacionado con un evento catastrófico en el que Dios decidió destruir a la humanidad debido a la maldad. El diluvio se describe en el libro del Génesis y su palabra clave es diluvio. Su etimología se remonta al latín y al antiguo hebreo, y su origen bíblico se encuentra en el relato de Noé y el arca. Aunque su interpretación puede variar, el diluvio es considerado uno de los episodios más importantes en la historia bíblica.
Última actualización: 30 junio, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de diluvio:
Génesis 7:6
Era Noé de seiscientos años cuando el diluvio de las aguas vino sobre la tierra.
Génesis 7:17
Y fue el diluvio cuarenta días sobre la tierra; y las aguas crecieron, y alzaron el arca, y se elevó sobre la tierra.
Génesis 9:11
Estableceré mi pacto con vosotros, y no exterminaré ya más toda carne con aguas de diluvio, ni habrá más diluvio para destruir la tierra.
Génesis 9:15
Y me acordaré del pacto mío, que hay entre mí y vosotros y todo ser viviente de toda carne; y no habrá más diluvio de aguas para destruir toda carne.
Génesis 9:28
Y vivió Noé después del diluvio trescientos cincuenta años.
Génesis 10:1
Los descendientes de los hijos de Noé(1 Cr. 1.5-23) Estas son las generaciones de los hijos de Noé: Sem, Cam y Jafet, a quienes nacieron hijos después del diluvio.
Salmos 29:10
Jehová preside en el diluvio, Y se sienta Jehová como rey para siempre.
Mateo 24:39
y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos, así será también la venida del Hijo del Hombre.
Lucas 17:27
Comían, bebían, se casaban y se daban en casamiento, hasta el día en que entró Noé en el arca, y vino el diluvio y los destruyó a todos.
2 Pedro 2:5
y si no perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé, pregonero de justicia, con otras siete personas, trayendo el diluvio sobre el mundo de los impíos;