Predicación Significado Bíblico

La predicación es un término que se encuentra ampliamente utilizado en la Biblia para referirse a la acción de transmitir el mensaje de Dios a otras personas. En el contexto bíblico, la predicación tiene un significado profundo y trascendental, ya que implica la responsabilidad de llevar la palabra divina a quienes aún no la conocen o necesitan ser recordados de ella.

La palabra "predicación" tiene su origen en el griego, específicamente en el término "kerygma", que significa "proclamación" o "anuncio público". Este término se utiliza en la Biblia para describir el acto de declarar y proclamar el mensaje de Dios a la humanidad. La predicación, entonces, no es simplemente una acción de hablar o enseñar, sino un acto de anunciar con autoridad y poder la verdad divina.

El origen de la predicación se remonta a los tiempos del Antiguo Testamento, donde los profetas eran los encargados de transmitir los mensajes de Dios al pueblo. Estos profetas eran llamados y ungidos por Dios para ser sus portavoces y llevar su palabra a las naciones. Su predicación no solo consistía en enseñar, sino en denunciar el pecado, llamar al arrepentimiento y anunciar el juicio divino.

En el Nuevo Testamento, la predicación adquiere un nuevo significado con la llegada de Jesucristo. Él mismo se presenta como el mensajero de Dios, enviado para proclamar el evangelio del Reino de Dios y la salvación a través de su muerte y resurrección. Jesús no solo enseñó, sino que también predicó con autoridad y poder, llamando a las personas al arrepentimiento y a seguirle.

Después de la muerte y resurrección de Jesús, sus discípulos continuaron la tarea de la predicación. El libro de los Hechos de los Apóstoles relata cómo los apóstoles fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a predicar el evangelio en diferentes lugares, llevando la buena noticia de la salvación a todos los rincones del mundo conocido en ese momento.

La predicación en la Biblia no se limita solo a los líderes religiosos o a un grupo selecto de personas. Todos los creyentes son llamados a predicar el evangelio y proclamar la palabra de Dios. Esto no implica necesariamente subir a un púlpito y dar un sermón, sino vivir una vida coherente con los principios y valores cristianos, y estar dispuestos a dar testimonio de nuestra fe en todo momento.

En resumen, la predicación en la Biblia es el acto de transmitir el mensaje de Dios a otras personas. Es un llamado a proclamar la verdad divina con autoridad y poder. La predicación tiene sus raíces en el Antiguo Testamento, pero adquiere un nuevo significado con la llegada de Jesucristo en el Nuevo Testamento. Todos los creyentes son llamados a predicar el evangelio y llevar la palabra de Dios a quienes aún no la conocen. La predicación no se limita a un contexto formal, sino que implica vivir una vida coherente con nuestra fe y estar dispuestos a dar testimonio en todo momento.

Versículos de Predicación

Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de predicación:

Lucas 11:32 Los hombres de Nínive se levantarán en el juicio con esta generación, y la condenarán; porque a la predicación de Jonás se arrepintieron, y he aquí más que Jonás en este lugar.

Hechos 8:4 Predicación del evangelio en Samaria Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.

Hechos 18:5 Y cuando Silas y Timoteo vinieron de Macedonia, Pablo estaba entregado por entero a la predicación de la palabra, testificando a los judíos que Jesús era el Cristo.

Romanos 16:25 Doxología final Y al que puede confirmaros según mi evangelio y la predicación de Jesucristo, según la revelación del misterio que se ha mantenido oculto desde tiempos eternos,

1 Corintios 1:21 Pues ya que en la sabiduría de Dios, el mundo no conoció a Dios mediante la sabiduría, agradó a Dios salvar a los creyentes por la locura de la predicación.

1 Corintios 2:4 y ni mi palabra ni mi predicación fue con palabras persuasivas de humana sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de poder,

1 Corintios 15:14 Y si Cristo no resucitó, vana es entonces nuestra predicación, vana es también vuestra fe.

Filipenses 4:15 Y sabéis también vosotros, oh filipenses, que al principio de la predicación del evangelio, cuando partí de Macedonia, ninguna iglesia participó conmigo en razón de dar y recibir, sino vosotros solos;

2 Timoteo 4:17 Pero el Señor estuvo a mi lado, y me dio fuerzas, para que por mí fuese cumplida la predicación, y que todos los gentiles oyesen. Así fui librado de la boca del león.

Tito 1:3 y a su debido tiempo manifestó su palabra por medio de la predicación que me fue encomendada por mandato de Dios nuestro Salvador,

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