El nombre Itamar es de origen hebreo y tiene un significado muy especial en la Biblia. Este nombre aparece en varios pasajes bíblicos, siendo mencionado como el nombre de un personaje importante en el relato sagrado.
La etimología del nombre Itamar se deriva de la raíz hebrea "amar", que significa "hablar" o "decir". Por lo tanto, el nombre Itamar puede ser interpretado como "el que habla" o "el que dice". Esta interpretación se relaciona con la idea de comunicación y expresión verbal, lo cual es un aspecto fundamental en la relación entre Dios y los seres humanos según la Biblia.
En la Biblia, Itamar es mencionado como el hijo menor de Aarón, el hermano de Moisés. Aarón fue el primer sumo sacerdote de Israel y desempeñó un papel crucial en el liderazgo y la adoración del pueblo de Israel durante su travesía por el desierto. Itamar, por su parte, fue elegido para ser uno de los sacerdotes junto a su padre Aarón y sus hermanos mayores, Nadab y Abiú.
La importancia de Itamar radica en su papel como sacerdote, ya que su descendencia fue designada para servir en el sacerdocio de Israel. Aarón y sus hijos fueron llamados por Dios para ofrecer sacrificios y actuar como intermediarios entre Dios y el pueblo. Itamar, al igual que sus hermanos, recibió instrucciones precisas sobre cómo llevar a cabo los rituales sagrados y mantener la santidad del tabernáculo, el lugar de adoración de Israel en el desierto.
Además de su rol sacerdotal, Itamar también es mencionado en la Biblia como uno de los líderes de la tribu de Leví, la tribu de la cual provenían los sacerdotes de Israel. Itamar y sus descendientes tenían la responsabilidad de cuidar y transportar los objetos sagrados del tabernáculo, así como de enseñar la ley y los mandamientos de Dios al pueblo de Israel.
En resumen, el nombre Itamar tiene un significado bíblico importante relacionado con el sacerdocio y la comunicación con Dios. Su etimología indica la idea de hablar o decir, lo cual refleja la función de los sacerdotes como mediadores entre Dios y el pueblo. Itamar, siendo el hijo de Aarón y uno de los líderes de la tribu de Leví, desempeñó un papel esencial en la adoración y la transmisión de la ley divina en la antigua Israel. Su nombre, por lo tanto, lleva consigo una profunda connotación espiritual y religiosa.
Última actualización: 03 febrero, 2024
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de Itamar:
Éxodo 28:1
Las vestiduras de los sacerdotes(Ex. 39.1-31) Harás llegar delante de ti a Aarón tu hermano, y a sus hijos consigo, de entre los hijos de Israel, para que sean mis sacerdotes; a Aarón y a Nadab, Abiú, Eleazar e Itamar hijos de Aarón.
Levítico 10:12
Y Moisés dijo a Aarón, y a Eleazar y a Itamar sus hijos que habían quedado: Tomad la ofrenda que queda de las ofrendas encendidas a Jehová, y comedla sin levadura junto al altar, porque es cosa muy santa.
Levítico 10:16
Y Moisés preguntó por el macho cabrío de la expiación, y se halló que había sido quemado; y se enojó contra Eleazar e Itamar, los hijos que habían quedado de Aarón, diciendo:
Números 3:2
Y estos son los nombres de los hijos de Aarón: Nadab el primogénito, Abiú, Eleazar e Itamar.
Números 4:28
Este es el servicio de las familias de los hijos de Gersón en el tabernáculo de reunión; y el cargo de ellos estará bajo la dirección de Itamar hijo del sacerdote Aarón.
Números 26:60
Y a Aarón le nacieron Nadab, Abiú, Eleazar e Itamar.
1 Crónicas 24:1
También los hijos de Aarón fueron distribuidos en grupos. Los hijos de Aarón: Nadab, Abiú, Eleazar e Itamar.
1 Crónicas 24:3
Y David, con Sadoc de los hijos de Eleazar, y Ahimelec de los hijos de Itamar, los repartió por sus turnos en el ministerio.
1 Crónicas 24:5
Los repartieron, pues, por suerte los unos con los otros; porque de los hijos de Eleazar y de los hijos de Itamar hubo príncipes del santuario, y príncipes de la casa de Dios.
1 Crónicas 24:6
Y el escriba Semaías hijo de Natanael, de los levitas, escribió sus nombres en presencia del rey y de los príncipes, y delante de Sadoc el sacerdote, de Ahimelec hijo de Abiatar y de los jefes de las casas paternas de los sacerdotes y levitas, designando por suerte una casa paterna para Eleazar, y otra para Itamar.