La palabra "atento" tiene un significado especial en la Biblia. En su origen, proviene del término hebreo "shamar", que se traduce como "guardar", "observar" o "estar atento". Este término aparece en numerosas ocasiones a lo largo de las Escrituras y tiene un profundo significado espiritual.
En la Biblia, ser "atento" implica estar alerta y prestar atención a lo que Dios está diciendo o haciendo. Es estar en sintonía con la voluntad divina y obedecer sus mandamientos. Cuando una persona está atenta, está dispuesta a escuchar y aprender de Dios, buscando su dirección en todas las áreas de la vida.
La palabra "atento" también implica cuidado y protección. Cuando alguien está atento, está vigilante y en guardia contra cualquier peligro o amenaza. En el contexto bíblico, esto se refiere tanto a la protección física como a la espiritual. Dios promete estar atento a sus hijos, cuidándolos y protegiéndolos de todo mal.
Además, ser "atento" implica ser diligente y cuidadoso en la obediencia a Dios y en el cumplimiento de sus mandamientos. En la Biblia, se nos insta a ser diligentes en nuestra relación con Dios, a buscarle con todo nuestro corazón y a obedecer su Palabra. El ser atento implica no descuidar nuestra relación con Dios, sino más bien darle la prioridad y la importancia que se merece.
La palabra "atento" también está relacionada con la idea de ser consciente de la presencia de Dios en nuestras vidas. En la Biblia, se menciona que Dios está siempre atento a nosotros, conoce nuestros caminos y está cerca de aquellos que le buscan. Ser atento implica reconocer y valorar la presencia de Dios en nuestra vida diaria, buscando su guía y dependiendo de Él en todo momento.
En resumen, el significado bíblico de la palabra "atento" implica estar alerta, obediente, cuidadoso y consciente de la presencia de Dios en nuestras vidas. Ser atento implica buscar a Dios, obedecer su Palabra y confiar en su protección y cuidado. Es un llamado a vivir en una estrecha relación con nuestro Creador, reconociendo su autoridad y buscando su dirección en todo lo que hacemos.
Última actualización: 12 octubre, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de atento:
Jueces 21:21
y estad atentos; y cuando veáis salir a las hijas de Silo a bailar en corros, salid de las viñas, y arrebatad cada uno mujer para sí de las hijas de Silo, e idos a tierra de Benjamín.
1 Samuel 15:1
Saúl desobedece y es desechado Después Samuel dijo a Saúl: Jehová me envió a que te ungiese por rey sobre su pueblo Israel; ahora, pues, está atento a las palabras de Jehová.
2 Crónicas 6:40
Ahora, pues, oh Dios mío, te ruego que estén abiertos tus ojos y atentos tus oídos a la oración en este lugar.
2 Crónicas 7:15
Ahora estarán abiertos mis ojos y atentos mis oídos a la oración en este lugar;
Nehemías 1:6
esté ahora atento tu oído y abiertos tus ojos para oír la oración de tu siervo, que hago ahora delante de ti día y noche, por los hijos de Israel tus siervos; y confieso los pecados de los hijos de Israel que hemos cometido contra ti; sí, yo y la casa de mi padre hemos pecado.
Nehemías 1:11
Te ruego, oh Jehová, esté ahora atento tu oído a la oración de tu siervo, y a la oración de tus siervos, quienes desean reverenciar tu nombre; concede ahora buen éxito a tu siervo, y dale gracia delante de aquel varón. Porque yo servía de copero al rey.
Salmos 10:17
El deseo de los humildes oíste, oh Jehová; Tú dispones su corazón, y haces atento tu oído,
Salmos 33:15
Él formó el corazón de todos ellos; Atento está a todas sus obras.
Salmos 34:15
Los ojos de Jehová están sobre los justos, Y atentos sus oídos al clamor de ellos.
Proverbios 5:1
Amonestación contra la impureza Hijo mío, está atento a mi sabiduría, Y a mi inteligencia inclina tu oído,