La palabra "gera" tiene un significado bíblico muy importante y representa un concepto esencial en el contexto bíblico. Su etimología y origen se remontan a los tiempos antiguos de la Biblia, y su significado tiene profundas implicaciones para la comprensión de la fe y la vida espiritual.
El término "gera" se encuentra en varias ocasiones en la Biblia, especialmente en el Antiguo Testamento. En hebreo, esta palabra se escribe como גֵּרָא (gera) y se pronuncia como "ge-rah". Su significado literal es "piedra" o "pequeña piedra". Sin embargo, en el contexto bíblico, esta palabra adquiere un significado simbólico y representa algo más que una simple roca.
En la Biblia, la palabra "gera" se utiliza para describir a un extranjero o forastero. Se refiere a una persona que no es de la misma nación o comunidad, y que ha venido a vivir en un lugar ajeno a su origen. El término también se utiliza para referirse a un extranjero que se ha convertido al judaísmo y se ha unido al pueblo de Israel.
En el contexto bíblico, el concepto de "gera" está estrechamente relacionado con el tema de la hospitalidad y la justicia. La Biblia enseña que debemos tratar a los extranjeros con amor y respeto, y que no debemos oprimirlos ni maltratarlos. De hecho, se nos insta a amar a los extranjeros como a nosotros mismos, recordando que también nosotros fuimos extranjeros en Egipto.
El significado de "gera" en la Biblia va más allá de su definición literal. Representa la idea de la inclusión y la igualdad, y nos recuerda la importancia de tratar a todos los seres humanos con dignidad y respeto, independientemente de su origen o nacionalidad. También nos enseña que todos somos extranjeros en esta tierra, y que debemos estar dispuestos a recibir y ayudar a aquellos que buscan refugio y un lugar seguro.
En resumen, la palabra "gera" tiene un significado bíblico profundo y representa la idea de la inclusión, la justicia y la hospitalidad. Su origen y etimología se remontan a los tiempos antiguos de la Biblia, y su uso en el texto sagrado nos enseña la importancia de tratar a los extranjeros con amor y respeto. Nos recuerda que todos somos extranjeros en esta tierra y que debemos estar dispuestos a acoger y ayudar a aquellos que buscan refugio y un lugar seguro.
Última actualización: 03 febrero, 2024
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de gera:
Génesis 20:1
Abraham y Abimelec De allí partió Abraham a la tierra del Neguev, y acampó entre Cades y Shur, y habitó como forastero en Gerar.
Génesis 26:1
Isaac en Gerar Después hubo hambre en la tierra, además de la primera hambre que hubo en los días de Abraham; y se fue Isaac a Abimelec rey de los filisteos, en Gerar.
Génesis 26:26
Y Abimelec vino a él desde Gerar, y Ahuzat, amigo suyo, y Ficol, capitán de su ejército.
Génesis 46:21
Los hijos de Benjamín fueron Bela, Bequer, Asbel, Gera, Naamán, Ehi, Ros, Mupim, Hupim y Ard.
Números 3:47
tomarás cinco siclos por cabeza; conforme al siclo del santuario los tomarás. El siclo tiene veinte geras.
2 Samuel 19:18
Y cruzaron el vado para pasar a la familia del rey, y para hacer lo que a él le pareciera. Entonces Simei hijo de Gera se postró delante del rey cuando él hubo pasado el Jordán,
1 Reyes 2:8
También tienes contigo a Simei hijo de Gera, hijo de Benjamín, de Bahurim, el cual me maldijo con una maldición fuerte el día que yo iba a Mahanaim. Mas él mismo descendió a recibirme al Jordán, y yo le juré por Jehová diciendo: Yo no te mataré a espada.
1 Crónicas 8:7
Naamán, Ahías y Gera; este los transportó, y engendró a Uza y a Ahiud.
2 Crónicas 14:14
Atacaron también todas las ciudades alrededor de Gerar, porque el terror de Jehová cayó sobre ellas; y saquearon todas las ciudades, porque había en ellas gran botín.
Ezequiel 45:12
Y el siclo será de veinte geras. Veinte siclos, veinticinco siclos, quince siclos, os serán una mina.