Hisopo es una palabra que aparece varias veces en la Biblia, particularmente en el Antiguo Testamento. Es una planta que ha sido utilizada en ceremonias religiosas y medicinales desde hace mucho tiempo. En este artículo, exploraremos el significado bíblico de hisopo, su etimología y origen.
El hisopo es una planta aromática que crece en el Mediterráneo, Asia y África. En la antigüedad, se utilizaba para purificar y limpiar en ceremonias religiosas y medicinales. La planta de hisopo se utilizaba para hacer un hisopo, una especie de ramita que se usaba para esparcir agua y aceite en ceremonias religiosas.
La palabra hisopo proviene del griego "hyssopos" y del hebreo "ezov". En la Biblia, el hisopo se menciona varias veces en el contexto de la purificación y el perdón de los pecados. En el libro de Éxodo, Dios da instrucciones a Moisés sobre cómo purificar el tabernáculo y los objetos sagrados: "Tomarás también el hisopo, y lo mojarás en la sangre que estará en la vasija, y untarás con la sangre la aldaba de la puerta, y las dos jambas, y el dintel de la misma puerta, de la sangre que estará en la vasija" (Éxodo 12:22).
En el libro de Levítico, el hisopo se utiliza en la purificación de los leprosos: "Tomará luego el sacerdote cedro, hisopo y grana, y los mojará en la sangre de la ave muerta y en el agua viva, y rociará sobre la casa siete veces" (Levítico 14:51). También se utiliza en la purificación de los objetos sagrados: "Y rociará el sacerdote sobre la casa siete veces con la sangre de la expiación, y será limpia" (Levítico 16:19).
En el Nuevo Testamento, el hisopo se menciona en el contexto de la crucifixión de Jesús: "Entonces tomaron una esponja, y la llenaron de vinagre, y la pusieron en un hisopo, y se la acercaron a la boca" (Juan 19:29). Se cree que los soldados romanos utilizaron un hisopo para ofrecer vinagre a Jesús mientras estaba en la cruz.
En la medicina antigua, el hisopo se utilizaba como un antiséptico natural y para tratar dolencias respiratorias. En la actualidad, se ha demostrado que el hisopo tiene propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y antimicrobianas.
En resumen, el hisopo es una planta aromática que se ha utilizado en ceremonias religiosas y medicinales desde hace mucho tiempo. En la Biblia, se menciona varias veces en el contexto de la purificación y el perdón de los pecados. El hisopo también se utilizaba en la medicina antigua como un antiséptico natural y para tratar dolencias respiratorias. En la actualidad, se ha demostrado que el hisopo tiene propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y antimicrobianas.
Última actualización: 13 mayo, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de hisopo:
Levítico 14:4
el sacerdote mandará luego que se tomen para el que se purifica dos avecillas vivas, limpias, y madera de cedro, grana e hisopo.
Levítico 14:6
Después tomará la avecilla viva, el cedro, la grana y el hisopo, y los mojará con la avecilla viva en la sangre de la avecilla muerta sobre las aguas corrientes;
Levítico 14:49
Entonces tomará para limpiar la casa dos avecillas, y madera de cedro, grana e hisopo;
Levítico 14:51
Y tomará el cedro, el hisopo, la grana y la avecilla viva, y los mojará en la sangre de la avecilla muerta y en las aguas corrientes, y rociará la casa siete veces.
Levítico 14:52
Y purificará la casa con la sangre de la avecilla, con las aguas corrientes, con la avecilla viva, la madera de cedro, el hisopo y la grana.
Números 19:6
Luego tomará el sacerdote madera de cedro, e hisopo, y escarlata, y lo echará en medio del fuego en que arde la vaca.
Números 19:18
y un hombre limpio tomará hisopo, y lo mojará en el agua, y rociará sobre la tienda, sobre todos los muebles, sobre las personas que allí estuvieren, y sobre aquel que hubiere tocado el hueso, o el asesinado, o el muerto, o el sepulcro.
Salmos 51:7
Purifícame con hisopo, y seré limpio; Lávame, y seré más blanco que la nieve.
Juan 19:29
Y estaba allí una vasija llena de vinagre; entonces ellos empaparon en vinagre una esponja, y poniéndola en un hisopo, se la acercaron a la boca.
Hebreos 9:19
Porque habiendo anunciado Moisés todos los mandamientos de la ley a todo el pueblo, tomó la sangre de los becerros y de los machos cabríos, con agua, lana escarlata e hisopo, y roció el mismo libro y también a todo el pueblo,