La ayuda es un concepto central en la Biblia y tiene un significado profundo y trascendental. En la Biblia, la palabra "ayuda" proviene del término hebreo "ezer", que significa "ayudante" o "socorro". Este término se encuentra en diferentes pasajes del Antiguo Testamento, y su origen se remonta a la creación misma de la humanidad.
En el libro del Génesis, se relata cómo Dios creó al primer hombre, Adán, y luego creó a la primera mujer, Eva, para ser su ayuda idónea. Esta expresión "ayuda idónea" se traduce del hebreo "ezer kenegdo", que puede ser entendido como un "ayudante adecuado" o un "ayudante complementario". Esto implica que la mujer fue creada para ser una compañera y colaboradora de igual valor y dignidad para el hombre.
La idea de ayuda en la Biblia no implica una posición de inferioridad o subordinación, sino más bien una relación de mutuo apoyo y complementariedad. La mujer fue creada para ayudar al hombre en su misión y propósito en la vida, y viceversa. Juntos, hombre y mujer forman una unidad y se ayudan mutuamente en su crecimiento espiritual, emocional y físico.
La palabra "ayuda" también aparece en otros pasajes del Antiguo Testamento, donde se refiere a Dios como el ayudador del pueblo de Israel. Por ejemplo, en el Salmo 121:1-2, se dice: "Alzaré mis ojos a los montes; ¿de dónde vendrá mi ayuda? Mi ayuda viene de Jehová, que hizo los cielos y la tierra". Aquí, la palabra "ayuda" se asocia directamente con la intervención divina y el socorro que Dios brinda a su pueblo en tiempos de necesidad.
En el Nuevo Testamento, Jesús también es presentado como el ayudador de aquellos que creen en él. En Hebreos 13:6, se nos anima a confiar en Dios porque él es nuestro ayudador: "Así que podemos decir con confianza: El Señor es mi ayudador; no temeré lo que me pueda hacer el hombre". Jesús, a través de su vida, muerte y resurrección, ofrece ayuda y salvación a todos los que buscan su amor y perdón.
En resumen, la ayuda en la Biblia tiene un significado profundo y trascendental. Implica una relación de mutuo apoyo y complementariedad entre hombres y mujeres, así como la intervención divina de Dios como nuestro ayudador en tiempos de necesidad. La ayuda en la Biblia no implica subordinación, sino más bien una colaboración y unidad en el propósito y misión de Dios para la humanidad.
Última actualización: 30 junio, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de ayuda:
Deuteronomio 22:3
Así harás con su asno, así harás también con su vestido, y lo mismo harás con toda cosa de tu hermano que se le perdiere y tú la hallares; no podrás negarle tu ayuda.
Deuteronomio 33:7
Y esta bendición profirió para Judá. Dijo así: Oye, oh Jehová, la voz de Judá, Y llévalo a su pueblo; Sus manos le basten, Y tú seas su ayuda contra sus enemigos.
Josué 1:14
Vuestras mujeres, vuestros niños y vuestros ganados quedarán en la tierra que Moisés os ha dado a este lado del Jordán; mas vosotros, todos los valientes y fuertes, pasaréis armados delante de vuestros hermanos, y les ayudaréis,
Jueces 9:28
Y Gaal hijo de Ebed dijo: ¿Quién es Abimelec, y qué es Siquem, para que nosotros le sirvamos? ¿No es hijo de Jerobaal, y no es Zebul ayudante suyo? Servid a los varones de Hamor padre de Siquem; pero ¿por qué le hemos de servir a él?
2 Samuel 8:5
Y vinieron los sirios de Damasco para dar ayuda a Hadad-ezer rey de Soba; y David hirió de los sirios a veintidós mil hombres.
2 Samuel 10:11
Y dijo: Si los sirios pudieren más que yo, tú me ayudarás; y si los hijos de Amón pudieren más que tú, yo te daré ayuda.
2 Samuel 10:19
Viendo, pues, todos los reyes que ayudaban a Hadad-ezer, cómo habían sido derrotados delante de Israel, hicieron paz con Israel y le sirvieron; y de allí en adelante los sirios temieron ayudar más a los hijos de Amón.
2 Samuel 21:17
mas Abisai hijo de Sarvia llegó en su ayuda, e hirió al filisteo y lo mató. Entonces los hombres de David le juraron, diciendo: Nunca más de aquí en adelante saldrás con nosotros a la batalla, no sea que apagues la lámpara de Israel.
1 Reyes 1:7
Y se había puesto de acuerdo con Joab hijo de Sarvia y con el sacerdote Abiatar, los cuales ayudaban a Adonías.
2 Reyes 14:26
Porque Jehová miró la muy amarga aflicción de Israel; que no había siervo ni libre, ni quien diese ayuda a Israel;