El término "cordón" tiene un significado bíblico particular que se encuentra en varias ocasiones en la Biblia. En su sentido más básico, un cordón es una cuerda o una tira de material utilizado para atar o sujetar algo. Sin embargo, en el contexto bíblico, el cordón adquiere un significado simbólico más profundo y representa varios conceptos importantes.
La etimología de la palabra "cordón" se deriva del latín "chorda", que significa "cuerda". El término también tiene raíces en el griego "chordē", que se traduce como "cuerda" o "lazo". Estas raíces lingüísticas nos brindan una pista sobre el origen y el propósito del uso del cordón en la Biblia.
Uno de los primeros ejemplos del uso de la palabra "cordón" en la Biblia se encuentra en el libro de Génesis. En el capítulo 38, se relata la historia de Tamar y su suegro Judá. Tamar se disfrazó como una prostituta y Judá le entregó su cordón, su sello y su bastón como prenda de garantía. Este acto representaba una forma de compromiso o contrato entre ellos.
En otros pasajes bíblicos, el cordón se utiliza como un símbolo de unión o conexión. Por ejemplo, en Eclesiastés 4:12, se menciona que "un cordón de tres hilos no se rompe fácilmente". Esto se interpreta como una referencia a la importancia de la unidad y la solidaridad en las relaciones humanas.
Otra referencia destacada al cordón se encuentra en el libro de Ezequiel. En el capítulo 38, se describe cómo el profeta fue instruido por Dios para tomar un cordón y atarlo a su cintura como un signo de la futura cautividad de Israel. Esta imagen simbólica del cordón representa el vínculo entre Dios y su pueblo elegido, y cómo ese vínculo se debilitaría debido a su desobediencia.
Un pasaje aún más significativo sobre el cordón se encuentra en el libro de Job. En el capítulo 38, Dios responde a Job desde una tormenta y le pregunta: "¿Dónde estabas tú cuando yo fundé la tierra? Házmelo saber, si tienes inteligencia... ¿Con qué se sujetaron sus bases, o quién puso su piedra angular, cuando alababan todas las estrellas del alba, y se regocijaban todos los hijos de Dios?".
Esta descripción poética de la creación y la intervención divina se utiliza para mostrar la grandeza y el poder de Dios en contraste con la insignificancia del ser humano. El cordón se menciona en este contexto como un símbolo de la estructura y el orden que Dios ha establecido en el universo.
En resumen, el término "cordón" tiene un significado bíblico profundo que va más allá de su definición literal. Representa la unión, la conexión y el vínculo entre Dios y su pueblo, así como la estructura y el orden divinos en el universo. A través de sus referencias en la Biblia, el cordón nos invita a reflexionar sobre nuestra relación con Dios y nuestra comprensión de su poder y grandeza.
Última actualización: 03 febrero, 2024
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de cordón:
Génesis 38:18
Entonces Judá dijo: ¿Qué prenda te daré? Ella respondió: Tu sello, tu cordón, y tu báculo que tienes en tu mano. Y él se los dio, y se llegó a ella, y ella concibió de él.
Génesis 38:25
Pero ella, cuando la sacaban, envió a decir a su suegro: Del varón cuyas son estas cosas, estoy encinta. También dijo: Mira ahora de quién son estas cosas, el sello, el cordón y el báculo.
Éxodo 28:22
Harás también en el pectoral cordones de hechura de trenzas de oro fino.
Éxodo 39:17
y fijaron los dos cordones de oro en aquellos dos anillos a los extremos del pectoral.
Éxodo 39:18
Fijaron también los otros dos extremos de los dos cordones de oro en los dos engastes que pusieron sobre las hombreras del efod por delante.
Números 15:38
Habla a los hijos de Israel, y diles que se hagan franjas en los bordes de sus vestidos, por sus generaciones; y pongan en cada franja de los bordes un cordón de azul.
Josué 2:18
He aquí, cuando nosotros entremos en la tierra, tú atarás este cordón de grana a la ventana por la cual nos descolgaste; y reunirás en tu casa a tu padre y a tu madre, a tus hermanos y a toda la familia de tu padre.
Josué 2:21
Ella respondió: Sea así como habéis dicho. Luego los despidió, y se fueron; y ella ató el cordón de grana a la ventana.
Jeremías 52:21
En cuanto a las columnas, la altura de cada columna era de dieciocho codos, y un cordón de doce codos la rodeaba; y su espesor era de cuatro dedos, y eran huecas.
Ezequiel 27:24
Estos mercaderes tuyos negociaban contigo en varias cosas; en mantos de azul y bordados, y en cajas de ropas preciosas, enlazadas con cordones, y en madera de cedro.