El significado bíblico de la palabra errar es de gran importancia para comprender la enseñanza que la Biblia nos brinda sobre el error y el pecado. La palabra "errar" aparece en varias ocasiones en las Sagradas Escrituras, y su significado y contexto nos revelan valiosas lecciones sobre el camino correcto y la necesidad de buscar la guía de Dios en nuestras vidas.
La palabra "errar" tiene su origen en el latín "errare", que significa "equivocarse" o "desviarse del camino". Esta raíz latina también se encuentra presente en palabras como "error" y "errante". En el contexto bíblico, "errar" se refiere a alejarse del camino de Dios, a cometer errores o pecados que nos separan de su voluntad.
En el Antiguo Testamento, encontramos varios pasajes donde se utiliza la palabra "errar" para describir el acto de desviarse de los mandamientos y preceptos divinos. Por ejemplo, en el Salmo 119:110, el salmista declara: "Los impíos me han tendido lazos, pero no me he desviado de tus mandamientos". Aquí, el salmista muestra su fidelidad a los mandamientos de Dios, evitando el error y buscando siempre su voluntad.
En el Nuevo Testamento, el término "errar" también se utiliza para describir la condición pecaminosa del ser humano y su necesidad de redención. En Romanos 3:23, el apóstol Pablo afirma: "por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios". Aquí, Pablo nos muestra que todos hemos cometido errores y pecados, y que necesitamos la gracia y el perdón de Dios para ser restaurados.
Es importante destacar que la enseñanza bíblica sobre el error y el pecado no busca condenar, sino mostrar la necesidad de arrepentimiento y reconciliación con Dios. En Proverbios 24:16, se nos recuerda: "porque siete veces cae el justo, y vuelve a levantarse; pero los impíos caerán en el mal". Aquí, se nos muestra que, aunque podemos cometer errores, la clave está en reconocerlos, arrepentirnos y buscar la guía de Dios para levantarnos y seguir adelante en su camino.
En resumen, el significado bíblico de la palabra "errar" nos enseña sobre la necesidad de buscar la voluntad de Dios en nuestras vidas y evitar desviarnos de su camino. A través de la palabra de Dios, podemos encontrar guía y consuelo en medio de nuestros errores y pecados, y recibir su perdón y gracia para ser restaurados. Que este conocimiento nos anime a buscar siempre la verdad y a seguir el camino que Dios ha trazado para nosotros.
Última actualización: 12 octubre, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de errar:
Deuteronomio 27:18
Maldito el que hiciere errar al ciego en el camino. Y dirá todo el pueblo: Amén.
Job 12:16
Con él está el poder y la sabiduría; Suyo es el que yerra, y el que hace errar.
Proverbios 12:26
El justo sirve de guía a su prójimo; Mas el camino de los impíos les hace errar.
Isaías 19:14
Jehová mezcló espíritu de vértigo en medio de él; e hicieron errar a Egipto en toda su obra, como tambalea el ebrio en su vómito.
Isaías 28:7
Pero también estos erraron con el vino, y con sidra se entontecieron; el sacerdote y el profeta erraron con sidra, fueron trastornados por el vino; se aturdieron con la sidra, erraron en la visión, tropezaron en el juicio.
Jeremías 23:13
En los profetas de Samaria he visto desatinos; profetizaban en nombre de Baal, e hicieron errar a mi pueblo de Israel.
Jeremías 50:6
Ovejas perdidas fueron mi pueblo; sus pastores las hicieron errar, por los montes las descarriaron; anduvieron de monte en collado, y se olvidaron de sus rediles.
Oseas 4:12
Mi pueblo a su ídolo de madera pregunta, y el leño le responde; porque espíritu de fornicaciones lo hizo errar, y dejaron a su Dios para fornicar.
Amós 2:4
Así ha dicho Jehová: Por tres pecados de Judá, y por el cuarto, no revocaré su castigo; porque menospreciaron la ley de Jehová, y no guardaron sus ordenanzas, y les hicieron errar sus mentiras, en pos de las cuales anduvieron sus padres.
Miqueas 3:5
Así ha dicho Jehová acerca de los profetas que hacen errar a mi pueblo, y claman: Paz, cuando tienen algo que comer, y al que no les da de comer, proclaman guerra contra él: