Congregación Significado Bíblico

La palabra "congregación" tiene un significado muy importante en la Biblia. En el contexto bíblico, la palabra se refiere a un grupo de personas que se reúnen con un propósito específico, generalmente para adorar a Dios y recibir enseñanzas espirituales. La etimología de la palabra proviene del latín "congregatio", que significa "reunión" o "asamblea".

El origen de la palabra "congregación" en la Biblia se remonta al Antiguo Testamento. En hebreo, la palabra original es "qahal", que se usa para referirse a la asamblea de Israel. Esta palabra aparece en el libro de Deuteronomio, cuando Moisés convoca a todo el pueblo de Israel para renovar el pacto con Dios. En el Nuevo Testamento, la palabra "congregación" se traduce del griego "ekklesia", que significa "llamados fuera". Esta palabra se utiliza para hablar de la comunidad de creyentes en Jesucristo.

En la Biblia, la congregación no se limita a un lugar físico, sino que se refiere a un grupo de personas que comparten la misma fe y se reúnen para adorar a Dios. La congregación puede ser local, como una iglesia o una comunidad de creyentes en una determinada región. También puede referirse a la iglesia universal, que incluye a todos los creyentes en Jesucristo en todo el mundo.

La importancia de la congregación en la Biblia se destaca en varios pasajes. En Mateo 18:20, Jesús dice: "Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos". Esta enseñanza muestra que la presencia de Jesús es especial cuando los creyentes se reúnen en su nombre. Además, en Hebreos 10:25 se nos exhorta a no dejar de congregarnos, sino a animarnos mutuamente en la fe.

La congregación también cumple un papel importante en la vida espiritual de los creyentes. Es un lugar donde se comparten enseñanzas bíblicas, se reciben exhortaciones y se fortalece la fe. Además, es un espacio donde se puede encontrar apoyo y compañerismo con otros creyentes.

En resumen, la palabra "congregación" en la Biblia se refiere a un grupo de personas que se reúnen para adorar a Dios y recibir enseñanzas espirituales. Su origen se encuentra en el Antiguo Testamento, con la palabra hebrea "qahal", y en el Nuevo Testamento, con la palabra griega "ekklesia". La congregación no se limita a un lugar físico, sino que puede ser local o universal. La congregación desempeña un papel fundamental en la vida espiritual de los creyentes, ya que es un lugar donde se fortalece la fe y se encuentra compañerismo con otros creyentes.

Versículos de Congregación

Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de congregación:

Éxodo 12:3 Hablad a toda la congregación de Israel, diciendo: En el diez de este mes tómese cada uno un cordero según las familias de los padres, un cordero por familia.

Éxodo 12:6 Y lo guardaréis hasta el día catorce de este mes, y lo inmolará toda la congregación del pueblo de Israel entre las dos tardes.

Éxodo 16:1 Dios da el maná Partió luego de Elim toda la congregación de los hijos de Israel, y vino al desierto de Sin, que está entre Elim y Sinaí, a los quince días del segundo mes después que salieron de la tierra de Egipto.

Éxodo 16:2 Y toda la congregación de los hijos de Israel murmuró contra Moisés y Aarón en el desierto;

Éxodo 16:22 En el sexto día recogieron doble porción de comida, dos gomeres para cada uno; y todos los príncipes de la congregación vinieron y se lo hicieron saber a Moisés.

Éxodo 35:20 El pueblo trae la ofrenda Y salió toda la congregación de los hijos de Israel de delante de Moisés.

Éxodo 38:25 Y la plata de los empadronados de la congregación fue cien talentos y mil setecientos setenta y cinco siclos, según el siclo del santuario;

Levítico 4:14 luego que llegue a ser conocido el pecado que cometieren, la congregación ofrecerá un becerro por expiación, y lo traerán delante del tabernáculo de reunión.

Levítico 4:21 Y sacará el becerro fuera del campamento, y lo quemará como quemó el primer becerro; expiación es por la congregación.

Levítico 10:6 Entonces Moisés dijo a Aarón, y a Eleazar e Itamar sus hijos: No descubráis vuestras cabezas, ni rasguéis vuestros vestidos en señal de duelo, para que no muráis, ni se levante la ira sobre toda la congregación; pero vuestros hermanos, toda la casa de Israel, sí lamentarán por el incendio que Jehová ha hecho.

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