El significado bíblico de la palabra administrador es de gran importancia, ya que se menciona en varias ocasiones a lo largo de las Sagradas Escrituras. Para comprender su significado en el contexto bíblico, es necesario analizar tanto la etimología de la palabra como su origen.
La palabra "administrador" proviene del latín "administratorem", que a su vez se deriva del verbo "administro", que significa "dirigir", "gobernar" o "administrar". En la Biblia, el término administrador se refiere a una persona encargada de gestionar y cuidar de los bienes y recursos de otro, actuando en nombre y representación de esta autoridad.
El origen del concepto de administrador en la Biblia se remonta a los tiempos del Antiguo Testamento. En el libro de Génesis, encontramos la primera mención de un administrador en la figura de José, quien fue puesto a cargo de la casa de Potifar y más tarde se convirtió en el gobernador de Egipto bajo el faraón.
En el Nuevo Testamento, Jesús habla sobre la figura del administrador en varias de sus enseñanzas y parábolas. En el evangelio de Lucas, Jesús cuenta la parábola del administrador fiel y prudente, donde destaca la importancia de ser diligente y sabio en la administración de los bienes que se nos han confiado.
Además, en la primera carta de Pablo a los Corintios, el apóstol menciona la responsabilidad de los administradores de los misterios de Dios, refiriéndose a los líderes espirituales que tienen la tarea de enseñar y guiar a otros en la fe.
En resumen, el significado bíblico de la palabra administrador se refiere a la persona encargada de gestionar y administrar los bienes y recursos de otro, actuando en nombre y representación de esta autoridad. Esta figura se menciona tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento, y se destaca la importancia de ser diligente y sabio en esta responsabilidad.
Última actualización: 12 octubre, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de administrador:
1 Crónicas 27:31
y de las ovejas, Jaziz agareno. Todos estos eran administradores de la hacienda del rey David.
1 Crónicas 28:1
Salomón sucede a David Reunió David en Jerusalén a todos los principales de Israel, los jefes de las tribus, los jefes de las divisiones que servían al rey, los jefes de millares y de centenas, los administradores de toda la hacienda y posesión del rey y de sus hijos, y los oficiales y los más poderosos y valientes de sus hombres.
1 Crónicas 29:6
Entonces los jefes de familia, y los príncipes de las tribus de Israel, jefes de millares y de centenas, con los administradores de la hacienda del rey, ofrecieron voluntariamente.
1 Corintios 4:1
El ministerio de los apóstoles Así, pues, téngannos los hombres por servidores de Cristo, y administradores de los misterios de Dios.
1 Corintios 4:2
Ahora bien, se requiere de los administradores, que cada uno sea hallado fiel.
Tito 1:7
Porque es necesario que el obispo sea irreprensible, como administrador de Dios; no soberbio, no iracundo, no dado al vino, no pendenciero, no codicioso de ganancias deshonestas,
1 Pedro 4:1
Buenos administradores de la gracia de Dios Puesto que Cristo ha padecido por nosotros en la carne, vosotros también armaos del mismo pensamiento; pues quien ha padecido en la carne, terminó con el pecado,
1 Pedro 4:10
Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios.