El término "escudo" tiene un significado muy importante en la Biblia y representa una imagen poderosa y simbólica en el contexto bíblico. Su etimología se remonta al latín vulgar "scutum", que significa "protección" o "defensa".
En la Biblia, el escudo es mencionado en numerosas ocasiones como un símbolo de protección divina y seguridad. Se utiliza tanto de forma literal, para referirse a una pieza de armadura utilizada en la batalla, como de forma figurada, para representar la protección que Dios brinda a sus seguidores.
Uno de los pasajes más conocidos en los que se menciona el escudo es en el Salmo 91:4, que dice: "Con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas hallarás refugio; escudo y adarga es su verdad". Aquí, el escudo se presenta como un símbolo de la verdad de Dios, que brinda protección y refugio a aquellos que confían en Él.
En el contexto bíblico, el escudo también se asocia con la fe y la confianza en Dios. En Efesios 6:16, se nos exhorta a tomar "el escudo de la fe, con el cual podamos apagar todos los dardos de fuego del maligno". Aquí, el escudo representa la fe que nos protege de los ataques espirituales del enemigo.
Además, el escudo es mencionado en varios pasajes como una metáfora de la protección divina en tiempos de dificultad y peligro. En el Salmo 18:2, David declara: "Jehová es mi roca, mi fortaleza y mi libertador; mi Dios, mi roca en quien me refugio; mi escudo, la fuerza de mi salvación, mi alto refugio". Aquí, el escudo simboliza la seguridad y el amparo que Dios provee a aquellos que confían en Él.
En el Antiguo Testamento, los escudos también eran utilizados por los soldados como una pieza esencial de su armadura. En 1 Samuel 17:7, se describe a Goliat como un guerrero equipado con un escudo de bronce. Los escudos eran utilizados para protegerse de los ataques enemigos y eran considerados una herramienta esencial para la supervivencia en la batalla.
En resumen, el significado bíblico de la palabra "escudo" es muy rico y simbólico. Representa la protección divina, la fe y la confianza en Dios, así como la seguridad y el amparo que Él brinda a sus seguidores. Su etimología y origen se remontan al latín vulgar "scutum", que significa "protección" o "defensa". A lo largo de la Biblia, el escudo es presentado como un símbolo poderoso y significativo, tanto en el sentido literal de una pieza de armadura, como en el sentido figurado de la protección divina en tiempos de dificultad y peligro.
Última actualización: 03 febrero, 2024
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de escudo:
Deuteronomio 33:29
Bienaventurado tú, oh Israel. ¿Quién como tú, Pueblo salvo por Jehová, Escudo de tu socorro, Y espada de tu triunfo? Así que tus enemigos serán humillados, Y tú hollarás sobre sus alturas.
2 Samuel 1:21
Montes de Gilboa, Ni rocío ni lluvia caiga sobre vosotros, ni seáis tierras de ofrendas; Porque allí fue desechado el escudo de los valientes, El escudo de Saúl, como si no hubiera sido ungido con aceite.
2 Samuel 22:36
Me diste asimismo el escudo de tu salvación, Y tu benignidad me ha engrandecido.
1 Reyes 10:16
Hizo también el rey Salomón doscientos escudos grandes de oro batido; seiscientos siclos de oro gastó en cada escudo.
1 Reyes 10:17
Asimismo hizo trescientos escudos de oro batido, en cada uno de los cuales gastó tres libras de oro; y el rey los puso en la casa del bosque del Líbano.
1 Reyes 14:26
y tomó los tesoros de la casa de Jehová, y los tesoros de la casa real, y lo saqueó todo; también se llevó todos los escudos de oro que Salomón había hecho.
1 Crónicas 5:18
Historia de las dos tribus y media Los hijos de Rubén y de Gad, y la media tribu de Manasés, hombres valientes, hombres que traían escudo y espada, que entesaban arco, y diestros en la guerra, eran cuarenta y cuatro mil setecientos sesenta que salían a batalla.
1 Crónicas 12:8
También de los de Gad huyeron y fueron a David, al lugar fuerte en el desierto, hombres de guerra muy valientes para pelear, diestros con escudo y pavés; sus rostros eran como rostros de leones, y eran ligeros como las gacelas sobre las montañas.
2 Crónicas 9:16
asimismo trescientos escudos de oro batido, teniendo cada escudo trescientos siclos de oro; y los puso el rey en la casa del bosque del Líbano.
2 Crónicas 12:10
Y en lugar de ellos hizo el rey Roboam escudos de bronce, y los entregó a los jefes de la guardia, los cuales custodiaban la entrada de la casa del rey.