En la Biblia, la palabra "ídolo" tiene un significado muy específico y se refiere a una representación de un dios falso o a cualquier objeto al que se le da adoración o reverencia divina. El término tiene sus raíces en la palabra griega "eidōlon", que significa "imagen" o "figura". Su origen se remonta a la antigua práctica de adorar y reverenciar imágenes o figuras que se creían representaciones de deidades o dioses.
En el contexto bíblico, la palabra "ídolo" se utiliza para condenar la adoración de cualquier cosa que no sea el único y verdadero Dios. La idolatría es considerada un pecado grave y se menciona repetidamente en las Escrituras como algo que desagrada a Dios. En el Antiguo Testamento, por ejemplo, se prohíbe explícitamente adorar ídolos en el segundo mandamiento: "No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. No te inclinarás a ellas, ni las honrarás" (Éxodo 20:4-5).
La condena de la idolatría en la Biblia se basa en la creencia de que solo hay un Dios verdadero digno de adoración y reverencia. La adoración de ídolos se considera una forma de idolatría y se considera una ofensa grave contra Dios. En el Nuevo Testamento, el apóstol Pablo también advierte sobre la idolatría y exhorta a los creyentes a alejarse de ella: "Huid de la idolatría" (1 Corintios 10:14).
Es importante destacar que el concepto de ídolo en la Biblia no se limita solo a imágenes o figuras físicas. También puede referirse a cualquier cosa a la que una persona le da un valor excesivo o adora en lugar de Dios. Por ejemplo, el amor al dinero o la fama pueden convertirse en ídolos si se ponen por encima de la adoración y la obediencia a Dios.
En resumen, en la Biblia la palabra "ídolo" se refiere a una representación de un dios falso o a cualquier objeto al que se le da adoración o reverencia divina. Su origen se encuentra en la antigua práctica de adorar imágenes o figuras que se creían representaciones de deidades. La idolatría es condenada en la Biblia como un pecado grave y se considera una ofensa contra el único y verdadero Dios. Además de las representaciones físicas, el concepto de ídolo también puede aplicarse a cualquier cosa que una persona ponga por encima de Dios en términos de adoración y reverencia.
Última actualización: 12 octubre, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de ídolo:
Levítico 26:30
Destruiré vuestros lugares altos, y derribaré vuestras imágenes, y pondré vuestros cuerpos muertos sobre los cuerpos muertos de vuestros ídolos, y mi alma os abominará.
Deuteronomio 29:17
y habéis visto sus abominaciones y sus ídolos de madera y piedra, de plata y oro, que tienen consigo.
Deuteronomio 32:21
Ellos me movieron a celos con lo que no es Dios; Me provocaron a ira con sus ídolos; Yo también los moveré a celos con un pueblo que no es pueblo, Los provocaré a ira con una nación insensata.
Jueces 3:26
Mas entre tanto que ellos se detuvieron, Aod escapó, y pasando los ídolos, se puso a salvo en Seirat.
1 Samuel 31:9
Y le cortaron la cabeza, y le despojaron de las armas; y enviaron mensajeros por toda la tierra de los filisteos, para que llevaran las buenas nuevas al templo de sus ídolos y al pueblo.
2 Samuel 5:21
Y dejaron allí sus ídolos, y David y sus hombres los quemaron.
1 Reyes 11:5
Porque Salomón siguió a Astoret, diosa de los sidonios, y a Milcom, ídolo abominable de los amonitas.
1 Reyes 16:26
pues anduvo en todos los caminos de Jeroboam hijo de Nabat, y en el pecado con el cual hizo pecar a Israel, provocando a ira a Jehová Dios de Israel con sus ídolos.
2 Reyes 17:41
Así temieron a Jehová aquellas gentes, y al mismo tiempo sirvieron a sus ídolos; y también sus hijos y sus nietos, según como hicieron sus padres, así hacen hasta hoy.
2 Reyes 23:13
Asimismo profanó el rey los lugares altos que estaban delante de Jerusalén, a la mano derecha del monte de la destrucción, los cuales Salomón rey de Israel había edificado a Astoret ídolo abominable de los sidonios, a Quemos ídolo abominable de Moab, y a Milcom ídolo abominable de los hijos de Amón.