Mercader Significado Bíblico

La palabra "mercader" tiene un significado muy importante en la Biblia. En hebreo, la palabra original es "כְּנַעַן" (pronunciada como "kə·na·‘an"), que se traduce al español como "mercader" o "comerciante". Esta palabra tiene su origen en la raíz hebrea "כנע" (pronunciada como "kā·na‘"), que significa "humillar" o "doblegar".

En la Biblia, el término "mercader" se utiliza para referirse a aquellos que se dedican al comercio y al intercambio de bienes. Sin embargo, este término no solo se refiere a la actividad comercial en sí, sino que también tiene un significado más profundo y simbólico.

En muchos pasajes bíblicos, el término "mercader" se utiliza para describir a aquellos que buscan obtener ganancias a expensas de otros, sin importar los medios utilizados. Estos "mercaderes" son vistos como personas que se aprovechan de los demás, que engañan y que son injustos en sus tratos.

Un ejemplo claro de esto se encuentra en el Antiguo Testamento, en el libro de Ezequiel. En el capítulo 27, se describe la lamentación por la caída de Tiro, una ciudad que se había vuelto rica y poderosa a través del comercio marítimo. Sin embargo, en lugar de utilizar su riqueza para ayudar a los demás, los "mercaderes" de Tiro se volvieron arrogantes y orgullosos, y se olvidaron de Dios.

En el Nuevo Testamento, encontramos otro ejemplo en el libro de Apocalipsis. En el capítulo 18, se habla de la caída de Babilonia, una ciudad que simboliza la corrupción y la maldad del mundo. En este pasaje, se menciona a los "mercaderes de la tierra" que se han enriquecido a través de la inmoralidad y la explotación de los demás.

Por lo tanto, podemos ver que el término "mercader" en la Biblia no se refiere simplemente a aquellos que se dedican al comercio, sino que también representa un estado de corazón y una actitud hacia los demás. Los "mercaderes" bíblicos son aquellos que buscan obtener ganancias a cualquier costo, incluso si esto significa dañar a otros o actuar de manera injusta.

En resumen, el término "mercader" en la Biblia tiene un significado más profundo que simplemente referirse a aquellos que se dedican al comercio. Representa una actitud de egoísmo y explotación hacia los demás, y nos recuerda la importancia de actuar con justicia y amor en todas nuestras transacciones y relaciones.

Versículos de Mercader

Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de mercader:

1 Reyes 10:15 sin lo de los mercaderes, y lo de la contratación de especias, y lo de todos los reyes de Arabia, y de los principales de la tierra.

2 Crónicas 9:14 sin lo que traían los mercaderes y negociantes; también todos los reyes de Arabia y los gobernadores de la tierra traían oro y plata a Salomón.

Nehemías 10:31 Asimismo, que si los pueblos de la tierra trajesen a vender mercaderías y comestibles en día de reposo, nada tomaríamos de ellos en ese día ni en otro día santificado; y que el año séptimo dejaríamos descansar la tierra, y remitiríamos toda deuda.

Proverbios 31:24 Hace telas, y vende, Y da cintas al mercader.

Isaías 45:14 Así dice Jehová: El trabajo de Egipto, las mercaderías de Etiopía, y los sabeos, hombres de elevada estatura, se pasarán a ti y serán tuyos; irán en pos de ti, pasarán con grillos; te harán reverencia y te suplicarán diciendo: Ciertamente en ti está Dios, y no hay otro fuera de Dios.

Jeremías 10:17 Asolamiento de Judá Recoge de las tierras tus mercaderías, la que moras en lugar fortificado.

Ezequiel 26:12 Y robarán tus riquezas y saquearán tus mercaderías; arruinarán tus muros, y tus casas preciosas destruirán; y pondrán tus piedras y tu madera y tu polvo en medio de las aguas.

Ezequiel 27:23 Harán, Cane, Edén, y los mercaderes de Sabá, de Asiria y de Quilmad, contrataban contigo.

Ezequiel 27:24 Estos mercaderes tuyos negociaban contigo en varias cosas; en mantos de azul y bordados, y en cajas de ropas preciosas, enlazadas con cordones, y en madera de cedro.

Ezequiel 27:33 Cuando tus mercaderías salían de las naves, saciabas a muchos pueblos; a los reyes de la tierra enriqueciste con la multitud de tus riquezas y de tu comercio.

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