El fragor es una palabra que aparece en la Biblia y tiene un significado muy interesante. En su sentido más básico, fragor se refiere a un ruido fuerte y estruendoso, similar al estruendo de un trueno o el estrépito de una batalla. Sin embargo, en el contexto bíblico, el fragor adquiere un significado más profundo y simbólico.
La etimología de la palabra fragor proviene del latín "fragor", que significa "ruido" o "estrépito". Este término se deriva a su vez de la raíz indoeuropea "bhrag", que tiene el significado de "romper" o "hacer ruido". Así, podemos ver que el fragor está relacionado con la idea de un sonido fuerte que rompe el silencio.
En la Biblia, el fragor se menciona en varios pasajes que describen eventos importantes y significativos. Por ejemplo, en el libro del Éxodo, se habla del fragor del trueno y el relámpago que acompañó a la entrega de los Diez Mandamientos en el monte Sinaí. Este fragor se describe como un sonido atronador que hizo temblar a todo el pueblo.
Otro pasaje bíblico que menciona el fragor es el libro de Isaías, donde se habla del fragor de las batallas y el estruendo de los ejércitos. En este contexto, el fragor representa la violencia y la destrucción que acompaña a la guerra. También se menciona en el libro de Jeremías, donde se habla del fragor de las ciudades y la destrucción que viene sobre ellas.
En estos pasajes, el fragor se presenta como un símbolo de la presencia y acción de Dios. Es un sonido poderoso que anuncia su intervención en los asuntos humanos. El fragor es una señal de su poder y su justicia, y también puede ser interpretado como una advertencia o una llamada a la atención. Es un recordatorio de que Dios está activo en el mundo y que sus acciones tienen consecuencias.
En resumen, el fragor es una palabra bíblica que se refiere a un ruido fuerte y estruendoso. En la Biblia, el fragor se utiliza para describir eventos importantes y significativos, como el trueno en el monte Sinaí o el estruendo de las batallas. Además, el fragor simboliza la presencia y acción de Dios, representando su poder y justicia. Es un recordatorio de que Dios está presente y que sus acciones tienen consecuencias.
Última actualización: 12 octubre, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de fragor:
Nahúm 3:2
Chasquido de látigo, y fragor de ruedas, caballo atropellador, y carro que salta;