La palabra astro tiene un significado muy relevante en la Biblia, ya que se menciona en varios pasajes para referirse a cuerpos celestes como estrellas, planetas y otros astros. La etimología de la palabra proviene del griego "astron", que significa "estrella".
En la Biblia, el término astro se utiliza para describir tanto los astros naturales como los astros artificiales. En el Antiguo Testamento, se menciona en Génesis 1:14-17, donde se habla de la creación del sol, la luna y las estrellas como astros que sirven para marcar los tiempos y las estaciones. También se mencionan en varios salmos, como en el Salmo 8:3, donde se dice: "Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos, la luna y las estrellas que tú formaste".
En el Nuevo Testamento, la palabra astro se utiliza en Mateo 2:2 para referirse a la estrella que guio a los magos hasta el lugar donde nació Jesús. Este astro fue interpretado como una señal divina que anunciaba el nacimiento del Mesías.
Además de su significado literal, la palabra astro también tiene un significado simbólico en la Biblia. En varios pasajes, se utiliza para representar la gloria de Dios y su poderío. Por ejemplo, en Apocalipsis 4:5 se describe a Dios como "el que está sentado en el trono", rodeado de "relámpagos, voces y truenos", lo cual simboliza su majestuosidad y poder. En este contexto, los astros son utilizados como metáforas para representar la magnificencia de Dios.
En resumen, la palabra astro en la Biblia se refiere a los cuerpos celestes como estrellas, planetas y otros astros. Su origen etimológico proviene del griego "astron" que significa "estrella". Además de su significado literal, la palabra astro también tiene un significado simbólico, representando la gloria y el poder de Dios. A lo largo de la Biblia, se utiliza para describir tanto los astros naturales como los astros artificiales.
Última actualización: 12 octubre, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de astro:
Ezequiel 32:8
Haré entenebrecer todos los astros brillantes del cielo por ti, y pondré tinieblas sobre tu tierra, dice Jehová el Señor.
Daniel 1:20
En todo asunto de sabiduría e inteligencia que el rey les consultó, los halló diez veces mejores que todos los magos y astrólogos que había en todo su reino.
Daniel 2:2
Hizo llamar el rey a magos, astrólogos, encantadores y caldeos, para que le explicasen sus sueños. Vinieron, pues, y se presentaron delante del rey.
Daniel 2:10
Los caldeos respondieron delante del rey, y dijeron: No hay hombre sobre la tierra que pueda declarar el asunto del rey; además de esto, ningún rey, príncipe ni señor preguntó cosa semejante a ningún mago ni astrólogo ni caldeo.
Daniel 2:27
Daniel respondió delante del rey, diciendo: El misterio que el rey demanda, ni sabios, ni astrólogos, ni magos ni adivinos lo pueden revelar al rey.
Daniel 4:7
Y vinieron magos, astrólogos, caldeos y adivinos, y les dije el sueño, pero no me pudieron mostrar su interpretación,
Daniel 5:11
En tu reino hay un hombre en el cual mora el espíritu de los dioses santos, y en los días de tu padre se halló en él luz e inteligencia y sabiduría, como sabiduría de los dioses; al que el rey Nabucodonosor tu padre, oh rey, constituyó jefe sobre todos los magos, astrólogos, caldeos y adivinos,
Daniel 5:15
Y ahora fueron traídos delante de mí sabios y astrólogos para que leyesen esta escritura y me diesen su interpretación; pero no han podido mostrarme la interpretación del asunto.