Laico Significado Bíblico

La palabra "laico" tiene su origen en el término latino "laicus", que a su vez proviene del griego "laikós". En el contexto bíblico, el término "laico" se utiliza para referirse a aquellas personas que no pertenecen al clero o al sacerdocio, es decir, a aquellos individuos que no tienen una función religiosa oficial dentro de la iglesia.

En la Biblia, el término "laico" se menciona en varias ocasiones para hacer referencia a los creyentes comunes, aquellos que forman parte del pueblo de Dios pero que no tienen un rol específico en el liderazgo espiritual. En este sentido, el término "laico" se opone al término "clérigo", que se utiliza para referirse a aquellos individuos que tienen una posición de autoridad y liderazgo dentro de la iglesia.

El concepto de laicidad en la Biblia está relacionado con la idea de que todos los creyentes tienen igualdad de acceso a Dios y no hay una jerarquía basada en el estatus religioso. En este sentido, el laico es aquel que puede tener una relación directa con Dios y no necesita de intermediarios para comunicarse con él.

En el Nuevo Testamento, Jesús establece la idea de la igualdad entre todos los creyentes, sin importar su estatus social o religioso. En el Evangelio de Mateo, Jesús les dice a sus discípulos: "Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre" (Mateo 6:9). Esta oración, conocida como el Padre Nuestro, es un ejemplo de cómo todos los creyentes pueden dirigirse a Dios como su Padre, sin importar si son clérigos o laicos.

En el libro de Apocalipsis, se menciona a los "santos" como aquellos que participan en la adoración y el servicio a Dios. En este contexto, el término "santo" se refiere a todos los creyentes, tanto clérigos como laicos, que están consagrados a Dios y buscan vivir conforme a su voluntad.

Es importante mencionar que el término "laico" no tiene una connotación negativa en la Biblia. Al contrario, se reconoce el papel fundamental que desempeñan los laicos en la iglesia y en la difusión del evangelio. En la Primera Carta de Pedro, se exhorta a los creyentes a ser "una nación santa, un pueblo adquirido por Dios" (1 Pedro 2:9), lo cual incluye tanto a clérigos como a laicos.

En resumen, el término "laico" en la Biblia se refiere a aquellos creyentes que no tienen una función religiosa oficial dentro de la iglesia. Sin embargo, esto no implica una menor importancia o valor, ya que todos los creyentes tienen igualdad de acceso a Dios y desempeñan un papel fundamental en la difusión del evangelio y en el servicio a Dios.

Última actualización: 03 febrero, 2024