Precepto Significado Bíblico

En la Biblia, la palabra "precepto" se refiere a un mandato divino que se espera que se cumpla. El término proviene del latín "praecipere", que significa "ordenar" o "mandar". Los preceptos bíblicos se encuentran en todo el Antiguo y Nuevo Testamento, y se les da una gran importancia en la vida de los creyentes.

El origen de los preceptos bíblicos se remonta a Moisés en el Antiguo Testamento. Él recibió los Diez Mandamientos directamente de Dios en el monte Sinaí, y estos mandamientos se convirtieron en la base de la ley judía. Estos mandamientos incluyen preceptos como "no matarás", "no robarás" y "honrarás a tu padre y a tu madre".

En el Nuevo Testamento, Jesús enseñó a sus seguidores a obedecer los preceptos de Dios. Él dijo: "Si me amáis, guardad mis mandamientos" (Juan 14:15). Estos mandamientos incluyen preceptos como "ama a tu prójimo como a ti mismo" y "no juzgues para que no seas juzgado".

Para los cristianos, seguir los preceptos bíblicos es una parte importante de su fe. La Biblia dice que aquellos que obedecen los preceptos de Dios son bendecidos y prosperados. En el Salmo 119, el salmista escribe sobre su amor por los preceptos de Dios: "¡Cuánto amo tus preceptos! Todo el día son mi meditación" (Salmo 119:97).

El cumplimiento de los preceptos bíblicos también es visto como una forma de mostrar amor y gratitud a Dios. En Juan 14:21, Jesús dice: "El que tiene mis mandamientos y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama será amado por mi Padre, y yo lo amaré y me manifestaré a él".

En resumen, los preceptos bíblicos son mandatos divinos que se esperan que los creyentes obedezcan. Estos preceptos se originaron en los Diez Mandamientos entregados a Moisés en el Antiguo Testamento y se enseñaron aún más en el Nuevo Testamento por Jesús. Seguir los preceptos bíblicos es visto como una parte importante de la fe cristiana y una forma de mostrar amor y gratitud a Dios.

Versículos de Precepto

Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de precepto:

Génesis 26:5 por cuanto oyó Abraham mi voz, y guardó mi precepto, mis mandamientos, mis estatutos y mis leyes.

1 Reyes 2:3 Guarda los preceptos de Jehová tu Dios, andando en sus caminos, y observando sus estatutos y mandamientos, sus decretos y sus testimonios, de la manera que está escrito en la ley de Moisés, para que prosperes en todo lo que hagas y en todo aquello que emprendas;

1 Crónicas 28:8 Ahora, pues, ante los ojos de todo Israel, congregación de Jehová, y en oídos de nuestro Dios, guardad e inquirid todos los preceptos de Jehová vuestro Dios, para que poseáis la buena tierra, y la dejéis en herencia a vuestros hijos después de vosotros perpetuamente.

2 Crónicas 19:10 En cualquier causa que viniere a vosotros de vuestros hermanos que habitan en las ciudades, en causas de sangre, entre ley y precepto, estatutos y decretos, les amonestaréis que no pequen contra Jehová, para que no venga ira sobre vosotros y sobre vuestros hermanos. Haciendo así, no pecaréis.

2 Crónicas 33:8 y nunca más quitaré el pie de Israel de la tierra que yo entregué a vuestros padres, a condición de que guarden y hagan todas las cosas que yo les he mandado, toda la ley, los estatutos y los preceptos, por medio de Moisés.

Nehemías 1:7 En extremo nos hemos corrompido contra ti, y no hemos guardado los mandamientos, estatutos y preceptos que diste a Moisés tu siervo.

Salmos 19:8 Los mandamientos de Jehová son rectos, que alegran el corazón; El precepto de Jehová es puro, que alumbra los ojos.

Salmos 103:20 Bendecid a Jehová, vosotros sus ángeles, Poderosos en fortaleza, que ejecutáis su palabra, Obedeciendo a la voz de su precepto.

Ezequiel 20:19 Yo soy Jehová vuestro Dios; andad en mis estatutos, y guardad mis preceptos, y ponedlos por obra;

Ezequiel 36:27 Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra.

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