La palabra "derramar" es utilizada en la Biblia para expresar diversos significados y conceptos relacionados con el acto de verter líquidos o substancias de manera abundante. Su etimología proviene del latín "derramare", que a su vez deriva de "de-" (separación o alejamiento) y "ramus" (rama o rama de un árbol), lo que sugiere la idea de separar o alejar algo de su lugar original.
En la Biblia, el verbo "derramar" se utiliza en diferentes contextos y con distintos sentidos. A continuación, exploraremos algunos de los significados más destacados de esta palabra en el contexto bíblico.
Uno de los usos más comunes de la palabra "derramar" en la Biblia es en referencia a los sacrificios y ofrendas que se ofrecían a Dios. Este acto simbólico de verter líquidos, como el vino o el aceite, sobre un altar o sobre una persona o cosa, representaba una entrega total y un acto de adoración.
En el Antiguo Testamento encontramos numerosas referencias a los sacrificios en los que se derramaba sangre como forma de expiación por el pecado. El derramamiento de sangre era considerado necesario para la purificación y reconciliación con Dios.
En el Nuevo Testamento, el derramamiento de la sangre de Jesús en la cruz es presentado como el sacrificio definitivo y suficiente para la redención de la humanidad. Jesús, al derramar su sangre, ofreció su vida como un sacrificio perfecto y completo.
En la Biblia, también encontramos el uso de la palabra "derramar" para expresar la idea de bendición o favor divino. Cuando Dios derrama su gracia sobre alguien o sobre un pueblo, está otorgando abundantes bendiciones y beneficios espirituales.
Esta idea de derramamiento de bendiciones se relaciona con la imagen del vaso que rebosa, es decir, cuando algo se llena en exceso y no puede contener más. Dios, en su generosidad y amor, derrama sus bendiciones sobre aquellos que le buscan y le obedecen.
Por otro lado, la palabra "derramar" también se utiliza en la Biblia para describir el juicio o la ira de Dios. Cuando Dios derrama su ira sobre un pueblo o nación, está manifestando su justicia y su rechazo hacia la maldad y la rebelión.
Este concepto de derramamiento de ira divina se encuentra principalmente en los libros proféticos del Antiguo Testamento, donde se advierte sobre las consecuencias de la desobediencia y el pecado. El derramamiento de la ira de Dios es presentado como una consecuencia natural y justa de las acciones humanas.
En resumen, la palabra "derramar" en la Biblia tiene diferentes significados y connotaciones dependiendo del contexto en el que se utilice. En su sentido más amplio, esta palabra representa tanto la entrega total y el sacrificio como la abundancia de bendiciones y la manifestación de la ira divina. A través de estos diferentes usos, se revela la naturaleza y el carácter de Dios, su justicia, su amor y su misericordia.
Última actualización: 12 octubre, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de derramar:
Éxodo 4:9
Y si aún no creyeren a estas dos señales, ni oyeren tu voz, tomarás de las aguas del río y las derramarás en tierra; y se cambiarán aquellas aguas que tomarás del río y se harán sangre en la tierra.
Levítico 4:30
Luego con su dedo el sacerdote tomará de la sangre, y la pondrá sobre los cuernos del altar del holocausto, y derramará el resto de la sangre al pie del altar.
Levítico 4:34
Después con su dedo el sacerdote tomará de la sangre de la expiación, y la pondrá sobre los cuernos del altar del holocausto, y derramará el resto de la sangre al pie del altar.
Deuteronomio 15:23
Solamente que no comas su sangre; sobre la tierra la derramarás como agua.
1 Samuel 25:26
Ahora pues, señor mío, vive Jehová, y vive tu alma, que Jehová te ha impedido el venir a derramar sangre y vengarte por tu propia mano. Sean, pues, como Nabal tus enemigos, y todos los que procuran mal contra mi señor.
1 Samuel 25:33
Y bendito sea tu razonamiento, y bendita tú, que me has estorbado hoy de ir a derramar sangre, y a vengarme por mi propia mano.
2 Crónicas 12:7
Y cuando Jehová vio que se habían humillado, vino palabra de Jehová a Semaías, diciendo: Se han humillado; no los destruiré; antes los salvaré en breve, y no se derramará mi ira contra Jerusalén por mano de Sisac.
2 Crónicas 34:25
por cuanto me han dejado, y han ofrecido sacrificios a dioses ajenos, provocándome a ira con todas las obras de sus manos; por tanto, se derramará mi ira sobre este lugar, y no se apagará.
Job 15:33
Perderá su agraz como la vid, Y derramará su flor como el olivo.
Job 16:20
Disputadores son mis amigos; Mas ante Dios derramaré mis lágrimas.