Jebuseo Significado Bíblico

El término jebuseo es mencionado en la Biblia y tiene un significado especial dentro de su contexto. En este artículo, exploraremos qué significa jebuseo en la Biblia, su etimología y su origen.

El término jebuseo se deriva de la palabra hebrea "yebusí", que significa "habitante de Jebús". Jebús era el nombre antiguo de Jerusalén antes de que fuera conquistada por el rey David y se convirtiera en la capital del reino de Israel. Por lo tanto, los jebuseos eran los habitantes originales de Jebús o Jerusalén.

En la Biblia, el término jebuseo se menciona en varios pasajes, principalmente en el Antiguo Testamento. En el libro de Josué, se habla de cómo los jebuseos habitaban la ciudad fortificada de Jebús y cómo los israelitas intentaron conquistarla. Además, en el libro de Jueces, se menciona que los jebuseos continuaron viviendo en Jerusalén junto con los hijos de Benjamín.

El origen de los jebuseos es un tema debatido entre los estudiosos bíblicos. Algunos creen que eran una tribu cananea que habitaba la región de Jebús antes de la llegada de los israelitas. Otros sugieren que podrían haber sido descendientes de los hititas o incluso de los amorreos. La falta de información histórica precisa hace que el origen exacto de los jebuseos sea incierto.

El papel de los jebuseos en la Biblia es importante debido a su relación con la ciudad de Jerusalén. Su presencia en Jebús fue un obstáculo para los israelitas en su intento de tomar la ciudad. Sin embargo, una vez que David se convirtió en rey, logró conquistar Jerusalén y los jebuseos fueron sometidos.

En conclusión, el término jebuseo en la Biblia se refiere a los habitantes originales de Jebús o Jerusalén. Su etimología se deriva de la palabra hebrea "yebusí". Aunque el origen exacto de los jebuseos sigue siendo incierto, su presencia en Jebús representó un desafío para los israelitas hasta que David logró conquistar la ciudad. A través de su historia en la Biblia, los jebuseos desempeñaron un papel significativo en la formación de Jerusalén como la capital del reino de Israel.

Versículos de Jebuseo

Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de jebuseo:

Éxodo 3:17 y he dicho: Yo os sacaré de la aflicción de Egipto a la tierra del cananeo, del heteo, del amorreo, del ferezeo, del heveo y del jebuseo, a una tierra que fluye leche y miel.

Éxodo 13:5 Y cuando Jehová te hubiere metido en la tierra del cananeo, del heteo, del amorreo, del heveo y del jebuseo, la cual juró a tus padres que te daría, tierra que destila leche y miel, harás esta celebración en este mes.

Éxodo 23:23 Porque mi Ángel irá delante de ti, y te llevará a la tierra del amorreo, del heteo, del ferezeo, del cananeo, del heveo y del jebuseo, a los cuales yo haré destruir.

Números 13:29 Amalec habita el Neguev, y el heteo, el jebuseo y el amorreo habitan en el monte, y el cananeo habita junto al mar, y a la ribera del Jordán.

Deuteronomio 7:1 Advertencias contra la idolatría de Canaán(Ex. 34.11-17) Cuando Jehová tu Dios te haya introducido en la tierra en la cual entrarás para tomarla, y haya echado de delante de ti a muchas naciones, al heteo, al gergeseo, al amorreo, al cananeo, al ferezeo, al heveo y al jebuseo, siete naciones mayores y más poderosas que tú,

Josué 11:3 y al cananeo que estaba al oriente y al occidente, al amorreo, al heteo, al ferezeo, al jebuseo en las montañas, y al heveo al pie de Hermón en tierra de Mizpa.

Josué 15:8 Y sube este límite por el valle del hijo de Hinom al lado sur del jebuseo, que es Jerusalén. Luego sube por la cumbre del monte que está enfrente del valle de Hinom hacia el occidente, el cual está al extremo del valle de Refaim, por el lado del norte.

Josué 24:11 Pasasteis el Jordán, y vinisteis a Jericó, y los moradores de Jericó pelearon contra vosotros: los amorreos, ferezeos, cananeos, heteos, gergeseos, heveos y jebuseos, y yo los entregué en vuestras manos.

Jueces 3:5 Así los hijos de Israel habitaban entre los cananeos, heteos, amorreos, ferezeos, heveos y jebuseos.

Jueces 19:11 Y estando ya junto a Jebús, el día había declinado mucho; y dijo el criado a su señor: Ven ahora, y vámonos a esta ciudad de los jebuseos, para que pasemos en ella la noche.

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