La palabra "apariencia" es un término que se utiliza en la Biblia para referirse a la forma externa o visible de algo o alguien. En su significado bíblico, la apariencia puede tener diferentes connotaciones dependiendo del contexto en el que se utilice.
La etimología de la palabra "apariencia" se remonta al latín "apparentia", que a su vez proviene del verbo "apparere", que significa "aparecer" o "hacerse visible". Este término se utiliza en la Biblia para describir la manifestación externa de algo o alguien, especialmente en relación con la presencia de Dios o de seres divinos.
En el Antiguo Testamento, la apariencia se menciona en varios pasajes. Por ejemplo, en Génesis 18:1 se habla de la apariencia de Dios a Abraham en forma de tres hombres. Esta apariencia de Dios es descrita como una manifestación visible que Abraham pudo percibir con sus sentidos. También en Éxodo 24:10 se habla de la apariencia de Dios en el monte Sinaí, donde los israelitas pudieron ver una especie de nube resplandeciente que indicaba la presencia divina.
En el Nuevo Testamento, la palabra "apariencia" se utiliza en varios contextos. Por ejemplo, en Mateo 28:3 se habla de la apariencia de un ángel en la tumba de Jesús, quien se presenta con un aspecto resplandeciente y provoca temor en los guardias. También en 2 Corintios 11:14 se menciona la apariencia de Satanás, quien se disfraza como ángel de luz para engañar a las personas.
La apariencia también puede referirse a la forma externa o apariencia física de las personas. En la Biblia, se hace referencia a la apariencia física de algunos personajes, como en 1 Samuel 16:7 donde se dice que Dios no se fija en la apariencia exterior, sino en el corazón de las personas. Esto indica que la apariencia física no es lo más importante para Dios, sino la actitud y los sentimientos internos.
En resumen, la palabra "apariencia" en la Biblia se refiere a la forma externa o visible de algo o alguien. Puede tener diferentes connotaciones dependiendo del contexto en el que se utilice, ya sea para describir la manifestación de Dios o seres divinos, o para referirse a la apariencia física de las personas. En cualquier caso, la apariencia no es lo más importante para Dios, sino el corazón y la actitud interna de las personas.
Última actualización: 03 febrero, 2024
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de apariencia:
Éxodo 24:17
Y la apariencia de la gloria de Jehová era como un fuego abrasador en la cumbre del monte, a los ojos de los hijos de Israel.
Números 12:8
Cara a cara hablaré con él, y claramente, y no por figuras; y verá la apariencia de Jehová. ¿Por qué, pues, no tuvisteis temor de hablar contra mi siervo Moisés?
Salmos 73:20
Como sueño del que despierta, Así, Señor, cuando despertares, menospreciarás su apariencia.
Ezequiel 1:5
y en medio de ella la figura de cuatro seres vivientes. Y esta era su apariencia: había en ellos semejanza de hombre.
Ezequiel 10:10
En cuanto a su apariencia, las cuatro eran de una misma forma, como si estuviera una en medio de otra.
Ezequiel 23:15
ceñidos por sus lomos con talabartes, y tiaras de colores en sus cabezas, teniendo todos ellos apariencia de capitanes, a la manera de los hombres de Babilonia, de Caldea, tierra de su nacimiento,
Daniel 8:15
Y aconteció que mientras yo Daniel consideraba la visión y procuraba comprenderla, he aquí se puso delante de mí uno con apariencia de hombre.
Marcos 12:14
Viniendo ellos, le dijeron: Maestro, sabemos que eres hombre veraz, y que no te cuidas de nadie; porque no miras la apariencia de los hombres, sino que con verdad enseñas el camino de Dios. ¿Es lícito dar tributo a César, o no? ¿Daremos, o no daremos?
2 Corintios 5:12
No nos recomendamos, pues, otra vez a vosotros, sino os damos ocasión de gloriaros por nosotros, para que tengáis con qué responder a los que se glorían en las apariencias y no en el corazón.
2 Corintios 10:7
Miráis las cosas según la apariencia. Si alguno está persuadido en sí mismo que es de Cristo, esto también piense por sí mismo, que como él es de Cristo, así también nosotros somos de Cristo.