La palabra "malicia" es un término bíblico que se utiliza para referirse a una actividad malvada, inmoral y dañina. Se refiere a la intención de causar daño a otros a través de la mentira, el engaño, el fraude, la defraudación y la violencia. En la Biblia, la palabra "malicia" se utiliza para describir a aquellos que hacen el mal intencionalmente. Esta palabra se relaciona con el concepto de pecado original, que se cree que todas las personas llevan en el corazón desde el nacimiento. La palabra "malicia" también se relaciona con la maldad humana, que se considera la principal causa de todos los males en el mundo.
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de malicia:
1 Samuel 17:28
Y oyéndole hablar Eliab su hermano mayor con aquellos hombres, se encendió en ira contra David y dijo: ¿Para qué has descendido acá? ¿y a quién has dejado aquellas pocas ovejas en el desierto? Yo conozco tu soberbia y la malicia de tu corazón, que para ver la batalla has venido.
Job 22:5
Por cierto tu malicia es grande, Y tus maldades no tienen fin.
Mateo 22:18
Pero Jesús, conociendo la malicia de ellos, les dijo: ¿Por qué me tentáis, hipócritas?
1 Corintios 5:8
Así que celebremos la fiesta, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con panes sin levadura, de sinceridad y de verdad.
1 Corintios 14:20
Hermanos, no seáis niños en el modo de pensar, sino sed niños en la malicia, pero maduros en el modo de pensar.
Efesios 4:31
Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia.
Colosenses 3:8
Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca.
Tito 3:3
Porque nosotros también éramos en otro tiempo insensatos, rebeldes, extraviados, esclavos de concupiscencias y deleites diversos, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles, y aborreciéndonos unos a otros.
Santiago 1:21
Por lo cual, desechando toda inmundicia y abundancia de malicia, recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas.
1 Pedro 2:1
Desechando, pues, toda malicia, todo engaño, hipocresía, envidias, y todas las detracciones,