Manoa Significado Bíblico

El nombre Manoa tiene un significado bíblico muy interesante. En la Biblia, Manoa es el padre de Sansón, uno de los jueces más conocidos del Antiguo Testamento. El nombre Manoa proviene del hebreo "מָנֹחַ" (Mānōaḥ), que significa "descanso" o "tranquilidad". Este nombre se menciona en el Libro de Jueces, capítulo 13, y es asociado con un hombre piadoso y obediente a Dios. Según la historia bíblica, Manoa y su esposa eran estériles y no podían tener hijos. Sin embargo, un ángel del Señor se les apareció y anunció que tendrían un hijo. El ángel también les dijo que el niño sería nazirita, es decir, consagrado a Dios desde su nacimiento y que no debía beber vino ni cortarse el cabello. Manoa y su esposa obedecieron las instrucciones del ángel y finalmente, tuvieron un hijo al que llamaron Sansón. Manoa es un ejemplo de fe y obediencia a Dios en la Biblia. A pesar de su esterilidad, no perdió la esperanza y siguió confiando en el Señor. Su nombre, que significa "descanso" o "tranquilidad", puede ser interpretado como una representación de la paz y la serenidad que encontró en su relación con Dios. Es importante mencionar que Manoa es un nombre bíblico y tiene un significado específico dentro del contexto religioso. Sin embargo, fuera de la Biblia, Manoa no es un lugar ni un personaje conocido. Por lo tanto, si encuentras referencias a Manoa que no están relacionadas con la historia bíblica de Sansón, es probable que se refieran a otro origen o significado. En resumen, el nombre Manoa tiene un significado bíblico relacionado con la historia de Sansón y su padre. Es un nombre hebreo que significa "descanso" o "tranquilidad". Manoa es recordado en la Biblia como un hombre de fe y obediencia a Dios. Si bien el nombre Manoa no es ampliamente conocido fuera del contexto bíblico, su significado y origen son importantes dentro de la narrativa religiosa.

Última actualización: 18 octubre, 2023

Versículos de Manoa

Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de Manoa:

Jueces 13:2 Y había un hombre de Zora, de la tribu de Dan, el cual se llamaba Manoa; y su mujer era estéril, y nunca había tenido hijos.

Jueces 13:8 Entonces oró Manoa a Jehová, y dijo: Ah, Señor mío, yo te ruego que aquel varón de Dios que enviaste, vuelva ahora a venir a nosotros, y nos enseñe lo que hayamos de hacer con el niño que ha de nacer.

Jueces 13:11 Y se levantó Manoa, y siguió a su mujer; y vino al varón y le dijo: ¿Eres tú aquel varón que habló a la mujer? Y él dijo: Yo soy.

Jueces 13:12 Entonces Manoa dijo: Cuando tus palabras se cumplan, ¿cómo debe ser la manera de vivir del niño, y qué debemos hacer con él?

Jueces 13:13 Y el ángel de Jehová respondió a Manoa: La mujer se guardará de todas las cosas que yo le dije.

Jueces 13:19 Y Manoa tomó un cabrito y una ofrenda, y los ofreció sobre una peña a Jehová; y el ángel hizo milagro ante los ojos de Manoa y de su mujer.

Jueces 13:20 Porque aconteció que cuando la llama subía del altar hacia el cielo, el ángel de Jehová subió en la llama del altar ante los ojos de Manoa y de su mujer, los cuales se postraron en tierra.

Jueces 13:21 Y el ángel de Jehová no volvió a aparecer a Manoa ni a su mujer. Entonces conoció Manoa que era el ángel de Jehová.

Jueces 13:22 Y dijo Manoa a su mujer: Ciertamente moriremos, porque a Dios hemos visto.

Jueces 16:31 Y descendieron sus hermanos y toda la casa de su padre, y le tomaron, y le llevaron, y le sepultaron entre Zora y Estaol, en el sepulcro de su padre Manoa. Y él juzgó a Israel veinte años.