Jabes Significado Bíblico

El nombre Jabes es un nombre masculino de origen hebreo que tiene un significado muy especial. A lo largo de la historia, este nombre ha adquirido una gran importancia, especialmente en el contexto bíblico. A continuación, exploraremos el significado, la etimología y el origen de este nombre fascinante.

El significado del nombre Jabes es "dolor" o "aflicción". Proviene de la raíz hebrea "ya'abes" que significa "causar dolor" o "provocar aflicción". Este significado puede ser interpretado de diferentes maneras, pero en general, se asocia con la idea de superar o traer alivio a través de la oración y la fe.

En la Biblia, el nombre Jabes aparece en el Antiguo Testamento. Jabes fue un personaje mencionado en el libro de 1 Crónicas, capítulo 4, versículos 9 y 10. Aunque no se le dedica mucho espacio en la Biblia, su historia es muy significativa. Jabes era un hombre que experimentaba una gran aflicción y dolor en su vida. Sin embargo, en lugar de dejarse llevar por la tristeza y el sufrimiento, Jabes decidió buscar a Dios y le pidió que lo bendijera y lo protegiera de todo mal.

La oración de Jabes se ha vuelto muy conocida y ha sido objeto de estudio y reflexión por parte de muchas personas. En su oración, Jabes pidió a Dios que ampliara sus límites, que extendiera su territorio, que estuviera con él y que lo protegiera del mal. Esta oración se ha interpretado como una petición de bendición, prosperidad y protección divina.

El nombre Jabes ha adquirido una gran popularidad en los últimos años, especialmente en comunidades cristianas. Muchas personas eligen este nombre para sus hijos como una forma de honrar la historia del personaje bíblico y también como un recordatorio de la importancia de la fe y la oración en momentos de dificultad y aflicción.

En resumen, el nombre Jabes tiene un significado profundo relacionado con el dolor y la aflicción. Su origen hebreo y su aparición en la Biblia le otorgan una importancia histórica y religiosa. La historia del personaje bíblico Jabes y su famosa oración han inspirado a muchas personas a confiar en la oración y la fe como una forma de superar dificultades y encontrar bendición y protección divina.

Última actualización: 03 julio, 2023

Versículos de Jabes

Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de Jabes:

Jueces 21:8 Y dijeron: ¿Hay alguno de las tribus de Israel que no haya subido a Jehová en Mizpa? Y hallaron que ninguno de Jabes-galaad había venido al campamento, a la reunión.

Jueces 21:9 Porque fue contado el pueblo, y no hubo allí varón de los moradores de Jabes-galaad.

Jueces 21:12 Y hallaron de los moradores de Jabes-galaad cuatrocientas doncellas que no habían conocido ayuntamiento de varón, y las trajeron al campamento en Silo, que está en la tierra de Canaán.

Jueces 21:14 Y volvieron entonces los de Benjamín, y les dieron por mujeres las que habían guardado vivas de las mujeres de Jabes-galaad; mas no les bastaron estas.

1 Samuel 11:3 Entonces los ancianos de Jabes le dijeron: Danos siete días, para que enviemos mensajeros por todo el territorio de Israel; y si no hay nadie que nos defienda, saldremos a ti.

1 Samuel 11:5 Y he aquí Saúl que venía del campo, tras los bueyes; y dijo Saúl: ¿Qué tiene el pueblo, que llora? Y le contaron las palabras de los hombres de Jabes.

2 Samuel 2:5 Entonces envió David mensajeros a los de Jabes de Galaad, diciéndoles: Benditos seáis vosotros de Jehová, que habéis hecho esta misericordia con vuestro señor, con Saúl, dándole sepultura.

2 Samuel 21:12 Entonces David fue y tomó los huesos de Saúl y los huesos de Jonatán su hijo, de los hombres de Jabes de Galaad, que los habían hurtado de la plaza de Bet-sán, donde los habían colgado los filisteos, cuando los filisteos mataron a Saúl en Gilboa;

2 Reyes 15:14 porque Manahem hijo de Gadi subió de Tirsa y vino a Samaria, e hirió a Salum hijo de Jabes en Samaria y lo mató, y reinó en su lugar.

1 Crónicas 4:10 E invocó Jabes al Dios de Israel, diciendo: ¡Oh, si me dieras bendición, y ensancharas mi territorio, y si tu mano estuviera conmigo, y me libraras de mal, para que no me dañe! Y le otorgó Dios lo que pidió.