La palabra "ministración" tiene un significado muy importante en la Biblia. Se refiere a la acción de servir y cuidar a los demás, especialmente en el contexto religioso. La etimología de la palabra proviene del latín "ministratio", que significa servicio o administración. En la Biblia, la ministración está estrechamente relacionada con el servicio a Dios y a los demás.
La idea de ministración se encuentra a lo largo de toda la Biblia, desde el Antiguo Testamento hasta el Nuevo Testamento. En el Antiguo Testamento, se menciona el servicio de los levitas en el tabernáculo y en el templo, donde se encargaban de las tareas religiosas y de cuidar de los objetos sagrados. Los sacerdotes también tenían la responsabilidad de ministrar a la gente, ofreciendo sacrificios y brindando orientación espiritual.
En el Nuevo Testamento, Jesús es presentado como el ejemplo supremo de ministración. Él mismo dijo: "El Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir y dar su vida en rescate por muchos" (Mateo 20:28). Jesús se dedicó a ministrar a las personas, curando a los enfermos, alimentando a los hambrientos y enseñando a las multitudes. Además, instruyó a sus discípulos a seguir su ejemplo y a servir a los demás.
La ministración también se menciona en las epístolas del Nuevo Testamento, donde se habla de los dones espirituales y del servicio en la iglesia. Por ejemplo, en Romanos 12:7-8, se menciona el don de la ministración: "El que tiene el don de servir, que sirva; el que enseña, que enseñe; el que exhorta, que exhorte". Aquí se destaca la importancia de ministrar a los demás según los dones y talentos que Dios ha dado a cada persona.
En resumen, la ministración en la Biblia significa servir y cuidar a los demás, tanto en el ámbito religioso como en el cotidiano. Esta palabra tiene su origen en el latín y está relacionada con el servicio y la administración. A lo largo de la Biblia, se enfatiza la importancia de ministrar a Dios y a los demás, siguiendo el ejemplo de Jesús y utilizando los dones espirituales que Dios nos ha dado. La ministración es un llamado a servir con amor, compasión y humildad, buscando el bienestar y el crecimiento espiritual de los demás.
Última actualización: 12 octubre, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de ministración:
2 Corintios 9:1
Cuanto a la ministración para los santos, es por demás que yo os escriba;
2 Corintios 9:12
Porque la ministración de este servicio no solamente suple lo que a los santos falta, sino que también abunda en muchas acciones de gracias a Dios;
2 Corintios 9:13
pues por la experiencia de esta ministración glorifican a Dios por la obediencia que profesáis al evangelio de Cristo, y por la liberalidad de vuestra contribución para ellos y para todos;