El término "naturaleza divina" tiene un significado profundamente arraigado en la Biblia, donde se refiere a la esencia y atributos de Dios. Esta expresión se utiliza para describir las características y cualidades que son inherentes a Dios y que lo distinguen de cualquier otro ser o entidad en el universo.
La etimología de la palabra "naturaleza" proviene del latín "natura", que significa "nacimiento" o "carácter". En el contexto bíblico, "naturaleza divina" se refiere a la esencia y carácter de Dios, que es considerado como la fuente y el origen de toda la creación.
El concepto de naturaleza divina se encuentra en varios pasajes de la Biblia, especialmente en el Antiguo Testamento. En el libro del Génesis, se nos dice que Dios creó al hombre a su imagen y semejanza (Génesis 1:26-27). Esto implica que el ser humano tiene una parte de la naturaleza divina, que lo distingue de otras formas de vida en la tierra.
En el Nuevo Testamento, el apóstol Pedro escribe en su segunda carta que los creyentes han sido hechos "participantes de la naturaleza divina" (2 Pedro 1:4). Esta afirmación muestra que los seguidores de Jesucristo, a través de su fe y relación con Él, pueden experimentar y manifestar características divinas en sus vidas.
La naturaleza divina implica una serie de atributos y características que son exclusivas de Dios. Algunas de estas cualidades incluyen la omnisciencia, omnipotencia, omnipresencia, justicia, amor, misericordia y santidad. Estas características definen la naturaleza de Dios y son manifestadas en su relación con la humanidad.
El concepto de la naturaleza divina también implica la idea de que Dios es trascendente y está más allá de la comprensión humana. Aunque podemos conocer y experimentar ciertos aspectos de su naturaleza, nuestra capacidad para comprender completamente a Dios es limitada debido a nuestras limitaciones humanas.
La naturaleza divina también se relaciona con el propósito y la voluntad de Dios para la humanidad. En la Biblia, se nos dice que Dios creó a los seres humanos para tener una relación personal con ellos y para reflejar su imagen en el mundo. Esto implica que el propósito último de la humanidad es vivir de acuerdo con la naturaleza divina y manifestar las cualidades y características de Dios en sus vidas.
En resumen, el término "naturaleza divina" se refiere a la esencia y atributos de Dios en la Biblia. Esta expresión describe las características y cualidades que son inherentes a Dios y que lo distinguen de cualquier otro ser en el universo. La naturaleza divina implica una serie de atributos y características exclusivas de Dios, como la omnisciencia, omnipotencia, justicia, amor, misericordia y santidad. También implica que los seres humanos, a través de su fe y relación con Dios, pueden experimentar y manifestar características divinas en sus vidas.
Última actualización: 03 febrero, 2024
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de naturaleza divina:
2 Pedro 1:3
Partícipes de la naturaleza divina Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia,
2 Pedro 1:4
por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia;