La palabra "desecho" tiene un significado muy interesante en la Biblia. En su sentido más básico, se refiere a algo que ha sido descartado, desechado o considerado como sin valor. Sin embargo, en el contexto bíblico, el término adquiere un significado más profundo y simbólico.
La etimología de la palabra "desecho" proviene del latín "desectus", que significa "cortado" o "separado". Esto nos da una pista sobre su origen y su relación con el concepto de desecho en la Biblia. En muchos pasajes bíblicos, se utiliza la palabra desecho para referirse a aquellos que han sido separados o apartados por Dios.
En el Antiguo Testamento, la palabra "desecho" se utiliza para describir a aquellos que han sido rechazados o abandonados por Dios debido a su maldad o incredulidad. Por ejemplo, en el libro de Jeremías, el profeta habla de los desechos de Israel, refiriéndose a aquellos que han sido apartados y abandonados por Dios debido a su idolatría y pecado.
En el Nuevo Testamento, la palabra "desecho" se utiliza en un contexto similar. En el libro de Romanos, el apóstol Pablo habla de aquellos que han sido entregados a la inmoralidad y la perversión como desechos. Aquí, la palabra desecho se utiliza para describir a aquellos que han sido entregados a sus propios deseos y han rechazado la verdad de Dios.
Es importante destacar que el concepto de desecho en la Biblia no se limita únicamente a las personas. También se utiliza para describir objetos materiales que han perdido su valor o utilidad. Por ejemplo, en el libro de Ezequiel, se habla de Jerusalén como un desecho, refiriéndose a su estado de destrucción y abandono.
En resumen, el significado bíblico de la palabra "desecho" va más allá de su sentido literal. Se refiere a aquellos que han sido separados, rechazados o abandonados por Dios debido a su maldad o incredulidad. También se utiliza para describir objetos materiales que han perdido su valor o utilidad. En ambos casos, el término desecho nos habla de la consecuencia del pecado y la importancia de mantenernos fieles a Dios.
Última actualización: 12 octubre, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de desecho:
1 Samuel 16:7
Y Jehová respondió a Samuel: No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón.
2 Reyes 17:20
Y desechó Jehová a toda la descendencia de Israel, y los afligió, y los entregó en manos de saqueadores, hasta echarlos de su presencia.
Salmos 53:5
Allí se sobresaltaron de pavor donde no había miedo, Porque Dios ha esparcido los huesos del que puso asedio contra ti; Los avergonzaste, porque Dios los desechó.
Salmos 78:67
Desechó la tienda de José, Y no escogió la tribu de Efraín,
Isaías 8:6
Por cuanto desechó este pueblo las aguas de Siloé, que corren mansamente, y se regocijó con Rezín y con el hijo de Remalías;
Jeremías 6:30
Plata desechada los llamarán, porque Jehová los desechó.
Lamentaciones 2:7
Desechó el Señor su altar, menospreció su santuario; Ha entregado en mano del enemigo los muros de sus palacios; Hicieron resonar su voz en la casa de Jehová como en día de fiesta.
Amós 8:6
para comprar los pobres por dinero, y los necesitados por un par de zapatos, y venderemos los desechos del trigo?
1 Corintios 4:13
Nos difaman, y rogamos; hemos venido a ser hasta ahora como la escoria del mundo, el desecho de todos.
Gálatas 2:21
No desecho la gracia de Dios; pues si por la ley fuese la justicia, entonces por demás murió Cristo.