La ira es un sentimiento humano que se ha experimentado desde tiempos antiguos. En la Biblia, la ira es un tema común que se aborda en muchos pasajes. La palabra "ira" se deriva de la palabra latina "ira" que significa enojo, rabia o furia. La palabra hebrea para la ira es "aph" que también significa nariz, lo que sugiere que la ira está relacionada con la respiración y la emoción.
En la Biblia, la ira se presenta como una emoción natural que puede ser provocada por la injusticia, la desobediencia y el pecado. Dios mismo se muestra como un Dios justo y celoso que se enoja cuando su pueblo se aleja de él y adora a otros dioses. En muchos pasajes bíblicos, se hace referencia a la ira de Dios y a cómo su ira se desata contra aquellos que lo desobedecen.
La ira también se menciona en muchos pasajes del Nuevo Testamento. Jesús mismo mostró ira cuando expulsó a los cambistas del templo, quienes habían convertido la casa de oración en un lugar de comercio. En Efesios 4: 26-27, se nos dice: "Enojarse, pero no pecar; no dejes que el sol se ponga mientras todavía estás enojado, ni des lugar al diablo". Este pasaje nos enseña que la ira en sí misma no es pecado, pero debemos tener cuidado de no permitir que la ira nos lleve a cometer pecado.
En la Biblia, la ira también puede ser vista como una herramienta de Dios para disciplinar a su pueblo. En Deuteronomio 28, se nos dice que si el pueblo de Dios desobedece sus mandamientos, experimentarán su ira en forma de maldiciones y juicios. Sin embargo, si se arrepienten y vuelven a Dios, él los perdonará y los restaurará. En Hebreos 12: 6-7, se nos dice que Dios disciplina a aquellos a quienes ama para que puedan crecer en santidad.
En cuanto a nosotros, como seres humanos, se nos aconseja en la Biblia que controlamos nuestra ira y no permitamos que nos domine. En Santiago 1:19-20, se nos dice: "Mis queridos hermanos, tengan presente esto: Todos deben estar listos para escuchar, y ser lentos para hablar y para enojarse, porque la ira humana no produce la vida justa que Dios desea". Este pasaje nos enseña que debemos ser pacientes y controlar nuestra ira para evitar decir o hacer cosas de las que nos arrepentiremos más tarde.
En resumen, la ira es una emoción humana natural que se aborda en la Biblia de varias formas. Dios mismo se muestra como un Dios justo y celoso que se enoja cuando su pueblo se aleja de él y adora a otros dioses. La ira también puede ser vista como una herramienta de Dios para disciplinar a su pueblo y llevarlos de vuelta a él. Para nosotros, como seres humanos, se nos aconseja que controlemos nuestra ira y no permitamos que nos domine. En última instancia, debemos confiar en Dios para que nos ayude a controlar nuestras emociones y a vivir en santidad.
Última actualización: 13 mayo, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de ira:
Génesis 24:4
sino que irás a mi tierra y a mi parentela, y tomarás mujer para mi hijo Isaac.
Génesis 24:55
Entonces respondieron su hermano y su madre: Espere la doncella con nosotros a lo menos diez días, y después irá.
Génesis 24:58
Y llamaron a Rebeca, y le dijeron: ¿Irás tú con este varón? Y ella respondió: Sí, iré.
Génesis 36:43
Magdiel e Iram. Estos fueron los jefes de Edom según sus moradas en la tierra de su posesión. Edom es el mismo Esaú, padre de los edomitas.
Éxodo 15:7
Y con la grandeza de tu poder has derribado a los que se levantaron contra ti. Enviaste tu ira; los consumió como a hojarasca.
Éxodo 23:23
Porque mi Ángel irá delante de ti, y te llevará a la tierra del amorreo, del heteo, del ferezeo, del cananeo, del heveo y del jebuseo, a los cuales yo haré destruir.
Éxodo 33:14
Y él dijo: Mi presencia irá contigo, y te daré descanso.
Levítico 10:6
Entonces Moisés dijo a Aarón, y a Eleazar e Itamar sus hijos: No descubráis vuestras cabezas, ni rasguéis vuestros vestidos en señal de duelo, para que no muráis, ni se levante la ira sobre toda la congregación; pero vuestros hermanos, toda la casa de Israel, sí lamentarán por el incendio que Jehová ha hecho.
Números 1:53
pero los levitas acamparán alrededor del tabernáculo del testimonio, para que no haya ira sobre la congregación de los hijos de Israel; y los levitas tendrán la guarda del tabernáculo del testimonio.
Números 2:17
Luego irá el tabernáculo de reunión, con el campamento de los levitas, en medio de los campamentos en el orden en que acampan; así marchará cada uno junto a su bandera.