La palabra "recinto" tiene un significado muy importante en la Biblia. En su sentido más básico, recinto se refiere a un espacio delimitado o cercado. Sin embargo, en el contexto bíblico, esta palabra adquiere un significado más profundo y simbólico.
La etimología de la palabra "recinto" proviene del latín "recintus", que significa "cercado" o "encerrado". Este término también tiene raíces en el griego "perípteros", que se refiere a un templo o edificio rodeado por una fila de columnas.
En la Biblia, el concepto de recinto está estrechamente relacionado con la presencia de Dios y su santuario. Por ejemplo, en el Antiguo Testamento, se menciona el recinto del templo de Jerusalén, que era considerado un lugar sagrado y separado del mundo profano. Este recinto era el lugar donde Dios habitaba y se revelaba a su pueblo.
El recinto del templo de Jerusalén era un lugar de adoración y sacrificio, donde los sacerdotes realizaban rituales y los fieles se acercaban a Dios. Además, este recinto también servía como un símbolo de protección y refugio, ya que representaba la presencia divina en medio del pueblo.
En el Nuevo Testamento, el concepto de recinto adquiere un nuevo significado a través de la figura de Jesucristo. En Juan 2:19-21, Jesús habla de su cuerpo como un templo y dice: "Destruid este templo, y en tres días lo levantaré... Pero él hablaba del templo de su cuerpo". Aquí, Jesús está estableciendo una conexión entre su cuerpo y el recinto sagrado del templo.
Este pasaje sugiere que, a través de su muerte y resurrección, Jesús se convierte en el nuevo recinto donde Dios habita y se revela a la humanidad. Jesús se presenta como el lugar donde podemos encontrar a Dios y experimentar su presencia de manera íntima y personal.
En resumen, el significado bíblico de la palabra "recinto" va más allá de su definición literal. Esta palabra representa un espacio sagrado y protegido, donde Dios habita y se revela a su pueblo. En el Antiguo Testamento, el recinto era el templo de Jerusalén, mientras que en el Nuevo Testamento, Jesús se presenta como el nuevo recinto donde podemos encontrar a Dios. Esta idea nos invita a acercarnos a Dios y experimentar su presencia en nuestras vidas.
Última actualización: 12 octubre, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de recinto:
2 Reyes 11:15
Mas el sacerdote Joiada mandó a los jefes de centenas que gobernaban el ejército, y les dijo: Sacadla fuera del recinto del templo, y al que la siguiere, matadlo a espada. (Porque el sacerdote dijo que no la matasen en el templo de Jehová.)
2 Crónicas 23:14
Pero el sacerdote Joiada mandó que salieran los jefes de centenas del ejército, y les dijo: Sacadla fuera del recinto, y al que la siguiere, matadlo a filo de espada; porque el sacerdote había mandado que no la matasen en la casa de Jehová.
Ezequiel 43:12
Esta es la ley de la casa: Sobre la cumbre del monte, el recinto entero, todo en derredor, será santísimo. He aquí que esta es la ley de la casa.
Ezequiel 45:4
Lo consagrado de esta tierra será para los sacerdotes, ministros del santuario, que se acercan para ministrar a Jehová; y servirá de lugar para sus casas, y como recinto sagrado para el santuario.