La palabra "suministrar" tiene un significado significativo en el contexto bíblico, siendo utilizada en varias ocasiones a lo largo de las Escrituras para transmitir conceptos relacionados con la provisión divina y el cuidado divino hacia sus hijos. Al explorar su etimología y origen, así como su aplicación en la Biblia, podemos obtener una comprensión más profunda de su significado espiritual.
En primer lugar, la etimología de la palabra "suministrar" se remonta al latín "subministrare", que significa "poner debajo", "administrar" o "proveer". Este término ha evolucionado a lo largo del tiempo, pero su esencia de proveer o administrar algo ha perdurado. En el contexto bíblico, el acto de suministrar está intrínsecamente relacionado con la idea de la provisión divina y la intervención de Dios en la vida de sus seguidores.
La primera aparición de la palabra "suministrar" en la Biblia se encuentra en el Antiguo Testamento, específicamente en el libro de Génesis. En Génesis 22:14 (NVI), Abraham nombra el lugar del sacrificio del carnero proporcionado por Dios como "El Señor proveerá", utilizando la palabra "proveer" que comparte similitudes semánticas con "suministrar". Este episodio establece un precedente para la confianza en la provisión divina y la idea de que Dios suministra lo que es necesario en el momento oportuno.
En el contexto del Nuevo Testamento, encontramos la palabra "suministrar" en varias ocasiones, destacando la conexión entre la provisión de Dios y las necesidades humanas. En Filipenses 4:19 (NVI), el apóstol Pablo proclama: "Mi Dios suplirá todas sus necesidades conforme a sus gloriosas riquezas en Cristo Jesús". Aquí, la palabra "suministrar" es clave para expresar la abundancia de las provisiones divinas en respuesta a la fe y la dependencia en Dios.
Otro pasaje importante que resalta el significado bíblico de "suministrar" se encuentra en 2 Corintios 9:10-11 (NVI): "El que suministra semilla al que siembra y pan para comer también suministrará y aumentará sus sementeras y hará crecer los frutos de su justicia". Aquí, la palabra se utiliza para describir la provisión de Dios no solo como necesidades básicas, sino también como una multiplicación y crecimiento en la justicia y las bendiciones divinas.
En el contexto de la fe cristiana, "suministrar" también puede referirse a la capacidad de Dios para equipar a sus seguidores con los recursos espirituales necesarios para cumplir con su propósito y obra en el mundo. Efesios 4:11-12 (NVI) destaca este concepto al afirmar que Dios dio a la iglesia apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros "para el perfeccionamiento de los santos, en obra de servicio, en edificación del cuerpo de Cristo". Aquí, la palabra "suministrar" subraya la provisión divina de dones espirituales para el beneficio y crecimiento del cuerpo de creyentes.
En conclusión, la palabra "suministrar" en la Biblia va más allá de simplemente proporcionar algo material. Implica la idea de la provisión divina, el cuidado paternal de Dios y su capacidad para equipar espiritualmente a aquellos que confían en Él. Su etimología y origen en el latín refuerzan la noción de poner a disposición y administrar de manera sabia y generosa. En cada aparición en las Escrituras, "suministrar" resuena con la promesa de Dios de proveer, sustentar y enriquecer la vida de aquellos que confían en su soberanía y amor inagotable.
Última actualización: 03 febrero, 2024
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