Hastío Significado Bíblico

El hastío es una palabra que se encuentra en la Biblia y que tiene un significado muy interesante. En su origen, proviene del latín fastidium, que significa aborrecimiento o repugnancia. En el contexto bíblico, el término hastío aparece en varios pasajes para describir un sentimiento de descontento, aburrimiento o disgusto hacia algo o alguien.

En la Biblia, el hastío se presenta como una consecuencia de la falta de satisfacción o de la búsqueda constante de placeres terrenales. Por ejemplo, en el libro de Eclesiastés, el sabio Salomón describe su búsqueda de la felicidad en distintas cosas, como la riqueza, la sabiduría y los placeres, pero al final concluye que todo es vanidad y hastío.

El término hastío también se relaciona con la falta de sentido o propósito en la vida. En el libro de Proverbios, se menciona que el alma que está hastiada de bienes se seca, lo cual indica que cuando una persona tiene todo lo que desea pero no encuentra satisfacción en ello, su vida se vuelve vacía y sin sentido.

Otro pasaje bíblico que habla del hastío es el relato del pueblo de Israel en el desierto. Después de ser liberados de la esclavitud en Egipto, el pueblo comenzó a quejarse y a desear volver a su antigua vida, a pesar de que Dios los estaba guiando hacia la tierra prometida. Esta actitud de ingrata insatisfacción es descrita como un hastío hacia la provisión divina.

En resumen, el hastío en la Biblia representa un sentimiento de descontento, aburrimiento o disgusto hacia algo o alguien. Es una consecuencia de la falta de satisfacción o de la búsqueda constante de placeres terrenales. También puede estar relacionado con la falta de propósito o sentido en la vida. La palabra tiene su origen en el latín y su etimología nos remite a la idea de aborrecimiento o repugnancia. Es importante recordar que la Biblia nos enseña a encontrar nuestra satisfacción y propósito en Dios, y no en las cosas temporales que pueden llevarnos al hastío.

Última actualización: 12 octubre, 2023

Versículos de Hastío

Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de hastío:

Ezequiel 23:17 Así, pues, se llegaron a ella los hombres de Babilonia en su lecho de amores, y la contaminaron, y ella también se contaminó con ellos, y su alma se hastió de ellos.

Ezequiel 23:18 Así hizo patentes sus fornicaciones y descubrió sus desnudeces, por lo cual mi alma se hastió de ella, como se había ya hastiado mi alma de su hermana.

Ezequiel 23:22 Por tanto, Aholiba, así ha dicho Jehová el Señor: He aquí que yo suscitaré contra ti a tus amantes, de los cuales se hastió tu alma, y les haré venir contra ti en derredor;

Ezequiel 23:28 Porque así ha dicho Jehová el Señor: He aquí, yo te entrego en mano de aquellos que aborreciste, en mano de aquellos de los cuales se hastió tu alma;