La palabra "mirar" tiene un significado bíblico muy profundo y representa una acción de gran importancia en el contexto de la Biblia. La etimología de esta palabra proviene del latín "mirari", que significa "admirar" o "contemplar". En la Biblia, "mirar" se refiere a la acción de observar con atención, reflexionar y considerar profundamente lo que se ve.
En el contexto bíblico, "mirar" se utiliza en diferentes contextos y con diferentes significados. En primer lugar, se utiliza para describir la acción de Dios al observar y considerar a la humanidad. La Biblia nos enseña que Dios mira a cada persona individualmente, con amor y compasión. En el Salmo 33:13-15 se dice: "Desde el cielo el Señor mira a toda la humanidad; desde su trono observa a todos los habitantes de la tierra. Él contempla a todos los que viven en el mundo; él está atento a todo lo que hacen." Esto demuestra la importancia que tiene para Dios el acto de mirar y cómo está siempre atento a nosotros.
Por otro lado, "mirar" también se utiliza para describir la actitud que debemos tener como creyentes hacia Dios y su palabra. En el Salmo 119:15, el salmista dice: "Meditaré en tus preceptos y contemplaré tus caminos." Aquí, "mirar" implica una acción de reflexión profunda y consideración de los caminos de Dios. También se utiliza en el sentido de prestar atención a la palabra de Dios y obedecerla. En el libro de Deuteronomio 26:16, se nos exhorta a "obedecer todos los mandamientos que hoy les ordeno." Esto implica mirar la palabra de Dios con atención y actuar en consecuencia.
Además, "mirar" también se utiliza en el contexto de las profecías y visiones. En el libro de Ezequiel, por ejemplo, se menciona varias veces la expresión "y miré, y he aquí, vi...". Esto indica que el profeta estaba contemplando una visión o una revelación de Dios.
En conclusión, la palabra "mirar" tiene un significado bíblico profundo y representa una acción de gran importancia en el contexto de la Biblia. Enseña sobre la atención y el amor de Dios hacia la humanidad, así como la actitud que debemos tener como creyentes hacia Dios y su palabra. También se utiliza en el contexto de las profecías y visiones. Es importante tener en cuenta que este significado va más allá de una simple observación visual, implica una reflexión profunda y una consideración de los caminos de Dios.
Última actualización: 03 febrero, 2024
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de mirar:
Génesis 18:16
Abraham intercede por Sodoma Y los varones se levantaron de allí, y miraron hacia Sodoma; y Abraham iba con ellos acompañándolos.
Levítico 13:10
Y este lo mirará, y si apareciere tumor blanco en la piel, el cual haya mudado el color del pelo, y se descubre asimismo la carne viva,
Levítico 13:17
y el sacerdote mirará; y si la llaga se hubiere vuelto blanca, el sacerdote declarará limpio al que tenía la llaga, y será limpio.
Levítico 13:25
el sacerdote la mirará; y si el pelo se hubiere vuelto blanco en la mancha, y esta pareciere ser más profunda que la piel, es lepra que salió en la quemadura; y el sacerdote lo declarará inmundo, por ser llaga de lepra.
Levítico 13:26
Mas si el sacerdote la mirare, y no apareciere en la mancha pelo blanco, ni fuere más profunda que la piel, sino que estuviere oscura, le encerrará el sacerdote por siete días.
Levítico 13:30
el sacerdote mirará la llaga; y si pareciere ser más profunda que la piel, y el pelo de ella fuere amarillento y delgado, entonces el sacerdote le declarará inmundo; es tiña, es lepra de la cabeza o de la barba.
Levítico 13:43
Entonces el sacerdote lo mirará, y si pareciere la hinchazón de la llaga blanca rojiza en su calva o en su antecalva, como el parecer de la lepra de la piel del cuerpo,
Levítico 13:50
Y el sacerdote mirará la plaga, y encerrará la cosa plagada por siete días.
Levítico 13:51
Y al séptimo día mirará la plaga; y si se hubiere extendido la plaga en el vestido, en la urdimbre o en la trama, en el cuero, o en cualquiera obra que se hace de cuero, lepra maligna es la plaga; inmunda será.
Levítico 14:36
Entonces el sacerdote mandará desocupar la casa antes que entre a mirar la plaga, para que no sea contaminado todo lo que estuviere en la casa; y después el sacerdote entrará a examinarla.