La palabra estímulo tiene un significado muy relevante en la Biblia. Este término se utiliza para describir una acción o un evento que despierta, motiva o impulsa a una persona a hacer algo. En el contexto bíblico, el estímulo se refiere principalmente a la exhortación, la animación y el apoyo que se ofrece a los creyentes para fortalecer su fe y su compromiso con Dios.
La etimología de la palabra estímulo proviene del latín "stimulus", que significa "punta de una vara aguda". Esta palabra se relaciona con la idea de picar o incitar a alguien, como si se le estuviera pinchando con una vara. En la Biblia, el estímulo se utiliza como una herramienta para incitar a los creyentes a seguir adelante en su caminar espiritual y a no desistir en medio de las dificultades.
El origen del concepto de estímulo en la Biblia se encuentra en las enseñanzas de Jesús y los apóstoles. A lo largo de los evangelios, Jesús alentaba a sus seguidores a perseverar en la fe, a amar a Dios y a amar a los demás. Además, los apóstoles, como Pablo, escribieron cartas a las iglesias primitivas para animarlos, exhortarlos y fortalecer su compromiso con Dios.
En el Nuevo Testamento, encontramos varios pasajes que hablan sobre el estímulo. Por ejemplo, en Hebreos 10:24-25 se nos insta a considerarnos mutuamente para estimularnos al amor y a las buenas obras, y a no abandonar nuestra congregación. En 1 Tesalonicenses 5:11, Pablo nos anima a exhortarnos y edificarnos unos a otros, y en 2 Timoteo 1:6-7, se nos recuerda que Dios nos ha dado un espíritu de poder, amor y dominio propio, y nos insta a avivar el fuego de nuestro don espiritual.
El estímulo en la Biblia también implica un llamado a la acción. No se trata solo de palabras vacías, sino de un desafío para que los creyentes se levanten y hagan la voluntad de Dios en sus vidas. En Santiago 1:22 se nos exhorta a ser hacedores de la palabra y no solo oidores, y en Romanos 12:11, se nos anima a no ser perezosos en lo que respecta al fervor espiritual, sino a ser fervientes en el espíritu, sirviendo al Señor.
En resumen, el estímulo en la Biblia es un llamado a la exhortación, la animación y el apoyo mutuo entre los creyentes. No se trata solo de palabras, sino de una acción que despierta y motiva a las personas a seguir adelante en su caminar espiritual. El estímulo nos desafía a amar a Dios y a los demás, a perseverar en la fe y a ser hacedores de la palabra. Es una herramienta poderosa que Dios utiliza para fortalecernos y animarnos en nuestra vida cristiana.
Última actualización: 12 octubre, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de estímulo:
Éxodo 35:21
Y vino todo varón a quien su corazón estimuló, y todo aquel a quien su espíritu le dio voluntad, con ofrenda a Jehová para la obra del tabernáculo de reunión y para toda su obra, y para las sagradas vestiduras.