La palabra convite proviene del latín invitare, que significa literalmente 'llamar, invitar'. Esta palabra aparece en muchas traducciones de la Biblia, particularmente en el Antiguo Testamento, y se refiere a una reunión festiva. En la Biblia, hay muchos ejemplos de convites, desde el convite que Dios ofreció a Abraham hasta los diferentes banquetes que Jesús compartió con sus seguidores.
Uno de los usos más destacados de la palabra convite en la Biblia es en la historia de la llamada de Abraham. En Génesis 18, Dios se le aparece a Abraham en la forma de tres hombres, y Abraham les ofrece un convite. Esta fue una ocasión muy importante en la vida de Abraham, y él lo celebró ofreciendo un banquete a sus invitados. Esta fue la primera vez que se menciona el concepto de un convite en la Biblia, y esta acción de Abraham fue una muestra clara de su devoción y fe en Dios.
Encontramos muchos ejemplos de convites en los evangelios. Jesús asistió a numerosos banquetes y se relacionó con muchos líderes religiosos. Durante estos convites, Jesús compartió sus enseñanzas y mostró su compasión a los marginados. Por ejemplo, en Lucas 14, Jesús invita a los pobres, los lisiados, los cojos y los ciegos a uno de sus banquetes. Esta fue una decisión muy significativa, ya que en aquel tiempo, estas personas eran generalmente excluidas de los banquetes. Esto fue una señal de la compasión de Jesús por los más necesitados.
Otro ejemplo significativo de un convite bíblico se encuentra en el Libro de Ester. En este relato, el rey Asuero invita a todas las mujeres de su reino a un gran banquete. Esta fue una oportunidad para que las mujeres pudieran expresar sus opiniones y deseos, y fue un momento importante para celebrar la diversidad del reino. Está relación se refleja en la vida moderna, y los convites siempre se han usado como una oportunidad para celebrar la diversidad y la alegría de la vida.
Los convites también se mencionan en el Apocalipsis. Aquí, se describe un gran banquete que está preparado en el cielo para los seguidores de Dios. Esta es la representación más clara de un convite en la Biblia, y es un recordatorio de que Dios nos ha invitado a una relación de amor eterno. Los convites bíblicos nos recuerdan que Dios está con nosotros en todas las situaciones, y que nos ha invitado a compartir Su amor y Su misericordia.
En conclusión, el término convite tiene un gran significado en la Biblia. Esta palabra se refiere a una reunión festiva, y las referencias bíblicas sugieren que los convites son una oportunidad para celebrar la diversidad y el amor de Dios. Esta palabra nos recuerda que Dios nos ha invitado a Su mesa, y que nos ha brindado la oportunidad de compartir Su amor eterno.
Última actualización: 15 marzo, 2023
Hemos encontrado los siguientes pasajes que hablan de convite:
Job 1:5
Y acontecía que habiendo pasado en turno los días del convite, Job enviaba y los santificaba, y se levantaba de mañana y ofrecía holocaustos conforme al número de todos ellos. Porque decía Job: Quizá habrán pecado mis hijos, y habrán blasfemado contra Dios en sus corazones. De esta manera hacía todos los días.
Salmos 69:22
Sea su convite delante de ellos por lazo, Y lo que es para bien, por tropiezo.
Romanos 11:9
Y David dice: Sea vuelto su convite en trampa y en red, En tropezadero y en retribución;